No son muchos los que han escuchado hablar de Lizard Island o Isla Lagarto, un espectacular paraje australiano que sorprende con sus aguas transparentes y playas de arena fina y absolutamente blanca. Y no es para menos, se trata de uno de los lugares más exclusivos del mundo.
El solo tiquete cuesta alrededor de US$4.000 por persona, es decir, unos $8 millones, y el hotel, que lleva su mismo nombre, no tiene más de 40 habitaciones. La idea es ofrecer a los visitantes una experiencia única, sin playas abarrotadas de gente ni vendedores, tiendas o restaurantes por doquier. Alejarse de todo e internarse en la naturaleza es la consigna.
Por estar en medio de la Gran Barrera de Coral, esta isla es ideal para los amantes del buceo. Durante las jornadas bajo el agua se observan más de 1.800 especies de peces, tortugas verdes, moluscos e incluso tiburones. La riqueza de la vida marina es única. No en vano esta barrera fue declarada Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco.
Isla Lagarto tiene 24 playas para disfrutar de baños de sol, caminatas y picnics a la luz de la Luna. El hotel (www.lizardisland.com.au) cuenta con pequeñas embarcaciones y veleros para navegar sobre aguas tranquilas y transparentes que permiten ver el fondo del mar sin ningún esfuerzo. La estadía es solo para mayores de 14 años. De esta forma se garantiza todavía más un absoluto y placentero descanso.