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Si está de viaje por Europa y disfruta de una buena caminata, National Geographic ha elaborado una selección de senderos ideales para quienes buscan recorridos accesibles pero llenos de belleza. Estos senderos fueron escogidos por su accesibilidad, buena señalización y paisajes impresionantes, lo que los convierte en opciones perfectas para disfrutar del senderismo sin necesidad de experiencia previa.
Aquí le decimos porque estás rutas son perfectas para explorar la naturaleza europea sin necesidad de ser un excursionista experto.
Tre Cime di Lavaredo, Italia
Las Tres Cimas de Lavaredo (Tre Cime di Lavaredo en italiano, Drei Zinnen en alemán) son un impresionante conjunto montañoso ubicado en los Dolomitas italianos, formado por tres distintivas formaciones rocosas: Cima Piccola (2.857m), Cima Grande (2.999m) y Cima Ovest (2.973m). Este icónico lugar, antiguo punto fronterizo entre Italia y Austria hasta 1919, atrae a senderistas, escaladores y fotógrafos de todo el mundo por sus característicos perfiles y el espectacular fenómeno cromático que tiñe sus paredes de rosa al atardecer. La ruta circular más popular comienza en el Refugio Auronzo, siguiendo el sendero 101 que permite contemplar estas formaciones dolomíticas desde diversos ángulos, con vistas impresionantes desde el Refugio Locatelli.
El sendero es relativamente accesible, con desniveles moderados y un trazado bien establecido que permite completar los aproximadamente 9 kilómetros de recorrido en 3-4 horas, ofreciendo constantemente impresionantes panorámicas de estas majestuosas formaciones rocosas que, tras millones de años bajo el mar, han sido esculpidas por la erosión hasta crear uno de los paisajes más emblemáticos de los Alpes europeos.
Sentiero Azzurro, Italia
El Sentiero Azzurro (Sendero Azul) es una emblemática red de caminos que recorre la costa de Liguria de Cinque Terre, conectando los cinco pintorescos pueblos de Monterosso, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore. Este sistema de senderos, que totaliza unos 12-13 kilómetros a lo largo de acantilados mediterráneos, ofrece vistas panorámicas inigualables del mar contrastando con las características casas de colores pastel. Aunque técnicamente podría recorrerse en un solo día (2-3 horas por tramo), los expertos recomiendan dedicarle 2-3 días para disfrutar plenamente de la experiencia, explorando los pueblos y degustando la gastronomía local. El sendero está bien equipado con barandillas en los tramos más comprometidos y señalización clara, pero requiere el pago de una entrada (disponible en formato de pases de uno o dos días con la Tarjeta Cinque Terre) que además incluye uso ilimitado de trenes y autobuses entre los pueblos.
Es importante tener en cuenta que algunos tramos pueden estar cerrados por desprendimientos (especialmente entre Riomaggiore, Manarola y Corniglia), pero la extensa red de caminos “secundarios” permite conectar todos los pueblos alejándose ligeramente del acantilado marino. Además del recorrido principal, existen caminos temáticos como el dedicado a la flora mediterránea, el que visita santuarios e iglesias, o el que recorre los viñedos en terrazas, así como el desafiante Anillo Walter Bonatti que parte de Porto Venere con un considerable desnivel de 330 metros en solo 2,9 kilómetros, ofreciendo diversas opciones para explorar este paisaje declarado Patrimonio de la Humanidad y Parque Nacional.
Chemin de Puy, Francia
El Camino de Le Puy, también conocido como Vía Podiensis, representa la ruta jacobea más antigua y popular de Francia, con 735 km que conectan Le Puy-en-Velay con Saint-Jean-Pied-de-Port, donde enlaza con el Camino Francés hacia Santiago de Compostela. Este itinerario histórico, iniciado entre 950-951 por el obispo Godescalc, destaca por su recorrido a través de paisajes diversos como las mesetas volcánicas del Velay, las planicies del Aubrac y los viñedos de Armagnac, así como por su rica herencia cultural presente en pueblos medievales. El tramo recomendado para una experiencia más accesible comprende 65 kilómetros por la apacible región de Gascuña, comenzando en Éauze y finalizando en la encantadora ciudad medieval de Lectoure, un recorrido que puede completarse en 4 días y que incluye visitas a localidades históricas como Montréal-du-Gers, Condom y La Romieu, todo ello perfectamente señalizado como parte del sendero GR65.
Para disfrutar del tramo recomendado en Gascuña, es aconsejable caminar en sentido contrario al habitual, partiendo de Éauze hacia Lectoure (accesibles mediante conexiones desde la estación de tren de Agen), lo que permite contemplar la espectacular aparición de esta última ciudad entre campos de trigo ondulantes en los 5 kilómetros finales del recorrido.
Muro de Adriano, Inglaterra
El Muro de Adriano, era una estructura defensiva romana que se extendía a lo largo de casi 120 kilómetros en el norte de Inglaterra que ofrece hoy una ruta de senderismo histórico, especialmente en su sección central de 34 kilómetros entre Birdoswald y Chollerford. Este tramo, recomendado para recorrer en 4-5 días, representa el segmento mejor conservado de este monumento declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987, permitiendo a los caminantes contemplar extensiones significativas de la muralla que originalmente alcanzaba los cuatro metros de altura. El sendero está perfectamente acondicionado con rutas alternativas más llanas para evitar terrenos accidentados, y cuenta con excelente infraestructura logística, con buses que conectan con estaciones ferroviarias en la línea Carlisle-Newcastle, además de numerosas casas de huéspedes distribuidas estratégicamente a lo largo del recorrido.
La experiencia trasciende el mero senderismo para convertirse en una inmersión arqueológica, donde destaca especialmente una desviación hacia Vindolanda, el yacimiento romano más importante de Gran Bretaña, ubicado a cuatro kilómetros del muro original. Este asentamiento ha proporcionado hallazgos como las casi dos mil Tablas de Vindolanda, documentos escritos en latín sobre tablillas de madera que ofrecen un testimonio único de la vida cotidiana de los soldados romanos y sus familias en esta frontera del Imperio.
Sendero del Archipiélago de Estocolmo, Suecia
El Sendero del Archipiélago de Estocolmo es una ruta de senderismo de 270 kilómetros que se extiende a través de 22 islas en el mar Báltico, frente a la costa este de Suecia. Este recorrido, permite a los excursionistas explorar la belleza natural de las islas mediante senderos claramente demarcados, conectados por ferries públicos y taxis acuáticos. Durante el trayecto, los caminantes pueden disfrutar de diversos paisajes como bosques de pinos, playas de arena blanca, acantilados rocosos y bahías tranquilas, además de experimentar el principio sueco del “allemansrätten” o derecho de acceso público a la naturaleza, incluso en terrenos privados.
La experiencia va más allá del simple senderismo, pues permite sumergirse en la cultura local al hospedarse en posadas históricas como el Sandhamn Seglarhotell o el Utö Värdshus, disfrutar de la gastronomía regional con platos como la trucha ártica, y participar en tradiciones como la sauna seguida de un baño en el mar Báltico.
Heidschnuckenweg, Alemania
El Camino de las Ovejas Heidschnucken (Heidschnuckenweg) se extiende por 223 kilómetros a través de los brezales de Lüneburg en el norte de Alemania, conectando Hamburgo con la ciudad medieval de Celle. Este sendero, nombrado en honor a la robusta oveja gris que ha modelado el paisaje durante siglos, atraviesa un paisaje único de brezales, dunas de arena, abedules y enebros, alcanzando su máximo esplendor en agosto cuando el brezo florece y tiñe todo el paisaje de púrpura. Con una elevación máxima de apenas 169 metros, el sendero ofrece caminatas accesibles divididas en 13 etapas, con buena señalización y excelentes conexiones de transporte público gracias al tren Heidebahn y los autobuses Heideshuttle.
Este sendero no solo ofrece una experiencia física placentera sino también un viaje a través de un ecosistema único que ha inspirado a artistas durante generaciones y fue uno de los primeros espacios naturales protegidos de Alemania en 1921. Los caminantes pueden disfrutar de amplias vistas panorámicas gracias al bajo crecimiento de la vegetación, experimentar la tranquilidad de pueblos tradicionales de madera como Wilsede (libre de automóviles), y observar los rebaños de ovejas Heidschnucken que continúan manteniendo el equilibrio ecológico del brezal.
Lechweg, Austria
El Lechweg es un sendero alpino de 124 km que sigue el curso del río Lech desde su nacimiento en Austria hasta su primera presa en Füssen, Alemania. La ruta atraviesa paisajes fluviales impresionantes con bancos de grava y llanuras aluviales rodeadas de majestuosas montañas, ofreciendo una experiencia de senderismo accesible sin exigencias físicas extremas. El recorrido puede realizarse en tres variantes: la clásica de 7 días (para excursionistas con buena condición física), la moderada de 8 días o la más relajada de 10 días, todas ellas brindando vistas espectaculares, lugares místicos y un contacto íntimo con la naturaleza virgen del Valle del Lech tirolés.
Para realizar esta aventura, los excursionistas pueden llegar desde los aeropuertos de Zúrich o Innsbruck utilizando tren y autobús hasta Lech, y al finalizar conectar con Múnich desde la estación de Reutte. Durante el trayecto, los caminantes descienden suavemente por valles y bosques, cruzan impresionantes puentes colgantes y disfrutan de un entorno natural que recuerda más a los paisajes canadienses que a los centroeuropeos.
Hallin Fell, Inglaterra
Hallin Fell es una pintoresca colina ubicada en el Parque Nacional del Distrito de los Lagos en Inglaterra, que se ha ganado el reconocimiento como un destino ideal para caminatas familiares gracias a su accesibilidad y extraordinarias vistas panorámicas. Con apenas 1,6 kilómetros de recorrido y un desnivel modesto de 150 metros, esta elevación puede conquistarse en aproximadamente una hora, ofreciendo como recompensa unas espectaculares vistas del lago Ullswater que la rodea por tres de sus lados. Los visitantes pueden acceder fácilmente a través de un aparcamiento cercano o disfrutar de una experiencia más completa tomando el ferry Ullswater Steamer desde Pooley Bridge hasta Howtown, lo que añade un encantador trayecto acuático a la aventura.
La geografía de Hallin Fell es particularmente interesante por su carácter aparentemente independiente a pesar de formar parte de una cresta continua desde Steel Knotts, una característica que le ha valido su clasificación como Marilyn entre las colinas británicas. La colina presenta una planta circular con suaves pendientes hacia el sur y oeste, tan accesibles que podrían “ascenderse cómodamente descalzo”. Mientras que el extremo norte, conocido como Peñón de Geordie, se adentra en el lago, dividiendo los tramos medio e inferior de Ullswater y completando así el magnífico panorama que atrae a tantos caminantes.
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