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En medio de un contexto difícil para la cadena láctea en Colombia por los altos inventarios y una caída del consumo que no se recupera, el Ministerio de Agricultura puso en marcha un paquete de medidas. Las acciones buscan dar solución de manera estructural a los retos que enfrenta el sector lechero.
Desde la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) aseguran que la baja ha sido del 9 % en los últimos dos años, pues se pasó de la ingesta de 162 litros por persona a 147 litros. En ello coinciden los datos de Raddar e indican que el comportamiento del gasto real desde marzo de 2023 a febrero de 2024 se ha mantenido en el -1,86 %.
En contexto: Bajo consumo y altos inventarios de leche prenden las alarmas del sector lácteo.
El ministerio establece que sus soluciones tienen que ver con el Sistema Nacional de Reforma Agraria, territorialización, el catastro multipropósito, ordenamiento productivo, sobreproducción, entre otros.
Una de las herramientas que impulsa la cartera para fomentar el consumo de leche y sus derivados es el programa de Compras Públicas. A través de este se busca que cada vez más pequeños y medianos productores cumplan con los requerimientos de inocuidad para que sean proveedores de esta estrategia, que lleva productos de la agricultura familiar, campesina, comunitaria y étnica a consumidores del sector público.
Esta es una de las peticiones más recurrentes que hacían desde el gremio ganadero y la Asociación Colombiana de Procesadores de la Leche (Asoleche). Las entidades consideran oportuno ofrecer los lácteos al Programa de Alimentación Escolar (PAE), a los comedores comunitarios y a las Fuerzas Militares, que las políticas públicas que favorezcan el consumo.
Otro punto que atiende el Ministerio de Agricultura es el de activar instrumentos que promueven las exportaciones. “Pronto se pondrá en marcha una estrategia dirigida a la sustitución de importaciones, en particular de leche en polvo”, detalla.
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Respecto a lo anterior, José Félix Lafaurie Rivera, presidente de Fedegán, le solicitó al ministerio, mediante una carta, establecer plantas pulverizadoras a través de alianzas público-privadas para contribuir a dicha sustitución.
“Poder aprovechar los tiempos en donde la oferta sube y los precios al productos caen estrepitosamente, serían diferentes al tener plantas pulverizadoras. Podríamos tener mayor oferta de leche, pero que va a la pulverizadora con precios, no a la baja, sino estables al ganadero. Y en las épocas de sequía, precios estables para la industria y no al alza, al usar el almacenamiento”, explica Lafaurie.
La cartera también contempla la renovación del Plan de Ordenamiento Productivo con un enfoque de reindustrialización, promocionando la dotación de infraestructura necesaria en los territorios para transformar el producto primario en otro con valor agregado, con cumplimiento de los requisitos sanitarios y de inocuidad.
“Para el Ministerio de Agricultura es una prioridad la seguridad y soberanía alimentaria, los procesos de gobernanza desde los territorios y el fortalecimiento de las organizaciones. Así, celebra la disposición que han manifestado diferentes sectores en relación con la construcción de soluciones a los retos del sector”, sostiene la entidad.
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