La Procuraduría General de la Nación conformó una "agencia especial" en la investigación que se adelanta para establecer las causas de la muerte del patrullero Jairo Alberto Díaz, cuyo cuerpo apareció en una quebrada en Villa Nivia, en la localidad de Usaquén, luego de que hubiera sido declarado como desaparecido.
El Ministerio Público vigilará el proceso con el fin de garantizar el debido desarrollo de las investigaciones que se adelantan por este hecho, el cual ha llamado la atención de la opinión pública. (Ver Medicina Legal confirmó que muerte de patrullero fue accidental)
Igualmente la Procuraduría, mediante su oficina de investigaciones especiales, adelantará la recolección de pruebas con el fin de establecer si la muerte del uniformado se presentó por un accidente o por manos criminales.
El pasado miércoles, la Fiscalía General anunció la apertura de una investigación formal con el fin de analizar las seis heridas de cinco centímetros de profundidad que registra el cráneo del uniformado, así como los gestos que presenta en su rostro con el fin de establecer si fue víctima de tortura.
En este sentido, basándose en el dictamen de Medicina Legal, el patrullero presenta una mordida en su lengua, lo cual ha llamado la atención de los peritos que investigarán las causas de estas heridas.
Según las primeras inspecciones, en el lugar de los hechos estaba el arma y los cartuchos del uniformado oxidados, los cuales también serán revisados por los peritos.
Igualmente fueron hallados documentos personales, dinero y joyas. Además la Fiscalía General citará a entrevista a los patrulleros que acompañaban al uniformado en el operativo adelantado.