La polémica sobre la publicación del código de vestimenta de la Cancillería colombiana sigue estando en la conversación de medios nacionales y las redes sociales, en donde usuarios han dejado sus opiniones, algunas a favor y otras en contra, sobre lo que ahora tendrán que usar hombres y mujeres para trabajar en esta entidad del estado.
Si bien se trata de una decisión que viene desde el área de talento humano y fue compartida desde este lunes 16 de enero, solo hasta hoy, 18 de enero, el canciller Álvaro Leyva se pronunció sobre la decisión.
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“El Ministerio de Relaciones Exteriores promueve los intereses nacionales en el exterior, es nuestro deber proyectar una imagen seria, profesional y acorde con la misión, visión y los objetivos institucionales, por esta razón la presentación personal no puede estar acompañada de ropa informal en las instalaciones del Ministerio”, afirma la entidad refiriéndose a una de las prendas más conocidas: los tenis.
¿Qué fue lo que dijo Álvaro Leyva sobre la decisión?
Justo al comienzo del documento se destaca que fue el mismo Leyva quien afirmó que “todos y todas son ministros” y que, por tanto, las personas deberían respetar la imagen institucional del Ministerio. “Es importante tener siempre presente que, como funcionarios públicos, somos parte de una imagen institucional acorde a los principios de la cultura, identidad histórica y organizacional del Ministerio”.
Sin embargo, durante la mañana de este miércoles, afirmó: “no soy quien diga como debe vestirse la gente”, ante la fuerte polémica que desató la decisión de la entidad. Hace algunos meses la ministra de Minas y Energía, Irene Vélez, recibió a la ministra de Industria, Comercio y Turismo de España, Reyes Maroto, en tenis.
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¿Qué afirma el nuevo código de vestimenta de la Cancillería?
La entidad dividió el vestuario de sus funcionarios en dos: casual de negocios y formal de negocios. Para las dos situaciones estipula claramente las prendas que se deben llevar y cuáles no, dependiendo de la situación, así:
Mujeres
- Formal de negocios: traje sastre de saco y falda, también puede ser pantalón o vestido completo con medias veladas. Evitar los escotes pronunciados y faldas cortas.
- Casual de negocios: vestido, falda, pantalón, dril oscuro y leggins (gruesos), acompañados por una camisa de manga corta, larga o tres cuartos con diferentes tipos de cuello. Es posible llevar suéter o saco, de cuello tortuga/redondo y un blazer o abrigo.
Las mujeres no podrán usar jeans rotos, con apliques, desteñidos o descaderados. Su maquillaje debe ser discreto, natural y sin tonalidades fuertes.
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Hombres
- Formal de negocios: traje de diseño clásico completo, camisa de manga larga, corbata o corbatín (con chaleco y pañuelo si es de su elección), correa de cuero, zapatos clásicos y calcetines largos.
- Casual de negocios: de chaqueta y pantalón diferente o de traje completo, sin corbata; también puede ser pantalón de dril (negro o azul oscuro), preferiblemente usarlo con blazer.
“La vestimenta formal de Negocios es por excelencia la ideal por su formalidad, dado que refleja carácter, personalidad y elegancia al vestir”, afirma el nuevo código de vestimenta de la Cancillería como uno de sus lineamientos más relevantes.