Indanecio Bolívar Villazón, pertenece al pueblo Wiwa, además es coordinador de cultura y economía propia de la Organización Wiwa Yugumaiun Bunkuanarrua Tayrona (OWYBT). Él es un hombre comprometido con sus costumbres ancestrales, su comunidad y con conservar la armonía entre el ser humano y la naturaleza. Es que el alimento que cultivan, la tierra y, en general, todo su entorno es algo sagrado para la comunidad.
“Nosotros bautizamos la comida y la naturaleza para tener armonía entre el ser humano y el ecosistema, por eso al momento de nacer a los pequeños del pueblo se les tiene que registrar con los cerros, los árboles, los animales y toda la naturaleza que nos rodea. Igualmente, hacemos trabajos espirituales para las enfermedades y un ritual cuando una pareja se casa, en la que lo principal son los frutos que da la tierra”, contó Bolívar.
El territorio del pueblo Wiwa, que hace parte del Parque Nacional Natural Sierra Nevada de Santa Marta donde, junto a Parques Nacionales de Colombia (PNN), la comunidad indígena gestiona la gobernanza de esta área protegida, recibe el apoyo de la Unión Europea, a través de del Programa Desarrollo Local Sostenible, con el que se promueven los sistemas de uso, manejo tradicional del territorio y la producción de semillas alimenticias nativas como sistema económico.
La comunidad Wiwa se suma a un gran esfuerzo a nivel mundial, en el que se han buscado plataformas para avanzar en el tema de sostenibilidad y se promocionan los sistemas agroalimentarios sostenibles; en el caso de la población indígena a la que pertenece Bolívar, se habla de un sistema de producción autosostenible en el que cosechan los alimentos que van a consumir.
“Nosotros no comercializamos los alimentos que sembramos como otros pueblos, ya que lo que hacemos es producir para el autoconsumo. Cultivamos plátano, yuca, malanga, aguacate, entre otros, con semillas propias de la comunidad. Además, en coordinación con PNN hemos obtenido un apoyo muy grande, logrando que las familias se dediquen a labores tradicionales y así garantizar su pervivencia y la de nuestra cultura”, resaltó Bolívar.
Para los Wiwas y Bolívar las formas de cultivo sostenibles son primordiales, por ello, tienen a la madre de la alimentación, que está ubicada en los sitios de gobierno de las diversas poblaciones que componen a esta comunidad indígena. “Producimos la mayoría de las semillas que tenemos, pero comercializamos lo que es café y panela, que son los que nos dan los recursos para la carne”, continuó Bolívar.
Es de destacar que, una de las metas que se tiene para este 2021, a nivel mundial, es avanzar en el diálogo integral, a través de la Cumbre Mundial de los Sistemas Alimentarios, a realizarse este 23 de septiembre de 2021. En ella, participaran delegados de organizaciones de sociedad civil, instituciones, academia y empresas del sector privado, ante la urgencia de que todos tomen medidas globales para mejorar la forma en la que se produce y consume.
Esta tendrá 5 vías de acción: garantizar el acceso a alimentos sanos y nutritivos para todos; adoptar modalidades de consumo sostenibles; impulsar la producción favorable a la naturaleza; promover medios de vida equitativos; y crear resiliencia ante las vulnerabilidades, las conmociones y las tensiones.
La Cumbre llega en un momento crucial de transformación del mundo. En este caso Colombia se ha sumado desde la alianza entre la Unión Europea (UE), la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo (AICS por sus siglas en italiano) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), a través de la estrategia ‘De la Granja a la Mesa’, incluida en el Pacto Verde (Green Deal).
“El apoyo que hemos tenido de la Unión Europea y de Parques Nacionales ha sido muy positiva porque hemos podido traer cosas que no teníamos para la agricultura como el alambre y otras herramientas. Actualmente, vemos los resultados en los jóvenes que se están involucrando en la agricultura sostenible”, dijo el líder Wiwa.
Hay que tener en cuenta que, la FAO indica que “los sistemas agroalimentarios emplean a 1.000 millones de personas en todo el mundo, más que cualquier otro sector económico. Además, nuestra forma de producir, consumir y, lamentablemente, desperdiciar alimentos le cobra un precio muy alto a nuestro planeta, ejerciendo una presión innecesaria en los recursos naturales, el medio ambiente y el clima”. La Organización recalca también que “necesitamos sistemas agroalimentarios sostenibles que sean capaces de alimentar a 10.000 millones de personas en 2050”.
Con todo este tema de sostenibilidad se está viviendo un reto global que es tener alimentos suficientes para la población, pero esto, sin duda, aumenta la presión sobre los recursos naturales y la producción agrícola, la cual hoy abastece al menos el 80% de los alimentos que se consumen en el mundo, según la FAO.
Es por eso que, acciones como la del pueblo Wiwa, contribuyen, fomentan y sirven de ejemplo para otras regiones, mostrando que se puede llegar a realizar una agricultura sostenible, que es una necesidad inaplazable que requiere de la suma de esfuerzos, la generación de alianzas y el desarrollo propositivo para que el sector rural pueda dar respuesta a la intensificación sostenible de su producción.
Y en esto, Colombia está comprometida con la promoción de sistemas sostenibles, es por eso que en el Plan Nacional de Desarrollo 2018 – 2022 se incluye, entre otras, la Estrategia Nacional de Economía Circular (ENEC), orientada al uso eficiente de los recursos, agua y energía, contribuyendo a la protección del ambiente, y promoviendo el desarrollo sostenible; en línea con la implementación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), así como con los lineamientos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en materia ambiental.
Se debe resaltar que, para reconocer el trabajo de los agricultores, que es tradicional en el linaje Wiwa, y de todos los que se dedican a esa gran labor de llevar comida a la mesa de cada uno de los seres humanos que habitan el planeta, es que cada año, el 9 de septiembre, se celebra el Día Mundial de la Agricultura. Ese trabajo inició hace miles de millones de años con las mujeres, que eran las encargadas de la recolección de alimentos, que luego comenzaron a cuidar y sembrar plantas silvestres; sin duda, un trabajo milenario que ha pasado de generación en generación como pasa con Indalecio Bolívar y su pueblo Wiwa.