La oleada de incendios que azota a Australia en los últimos meses es de proporciones inigualables. Este martes, las autoridades australianas ordenaron la evacuación de miles de persona en el sureste del país ante la amenaza de que se agraven los incendios en los próximos días. (Le recomendamos: Las imágenes de los voraces incendios que acorralan a miles de personas en Australia)
Pero los humanos no han sido los únicos que padecen las consecuencias de los incendios. En redes sociales se han hecho virales los videos de locales intentando rescatar a los animales en peligro, y según una investigación de los ecologistas de la Universidad de Sidney, cerca de 500 millones de mamíferos, pájaros y reptiles han perdido la vida por el fuego. Entre ellos se encuentran canguros, Koalas, Wombats, demonios de Tasmania y otras especies en peligro de extinción.
Uno de los casos que más preocupa en el país es el de los koalas, que no pueden moverse lo suficientemente rápido para escapar de los incendios y que, además, se alimentan de las hojas de árboles de eucalipto que son altamente inflamables. Se calcula que cerca de 8.000 (casi un tercio de la población total) habrían muerto desde septiembre. De hecho, la ministra Federal de Medio Ambiente, Sussan Ley, aseguró a la cadena ABC Radio que cerca del 30% de Kohalas en New South Wales habrían muerto por los incendios.
Voluntarios y especialistas se han mostrado preocupados porque no están recibiendo tantos pacientes animales como lo esperaban, lo que podría indicar que estos han muerto en los incendios sin poder escapar, como lo expresó Tracy Burgess, una voluntaria de Wildlife Information, Rescue and Education Services a Reuters.
Lo más preocupante es que la situación parece estar lejos de mejorarse. El país vive una de las mayores sequías y acaba de entrar en la estación de verano austral, por lo que no se esperan lluvias a corto plazo.
Este jueves más de 130 incendios están activos en las zonas de New South Wales y Victoria, y han alcanzado más de 9,9 millones de hectáreas a lo largo de cinco estados. Al menos 18 personas han muerto en total y cerca de 1.400 casas han quedad destruidas.
Según informa la agencia de noticias EFE, ante la gravedad de los incendios, el primer ministro australiano Scott Morrison se reunirá el lunes con el Comité de Seguridad Nacional para abordar la respuesta del Gobierno federal a estos incendios que normalmente son combatidos a nivel estatal y que se prevé arderán durante muchos meses más.
El mandatario, defensor de la industria del carbón y duramente criticado por su política climática, señaló que "no existe duda de que son desastres naturales", al insistir en que el cambio climático global no está vinculado a una incidencia de incendios forestales en particular.