Debido a incendios forestales, alerta roja en 14 departamentos
La fuerte sequía que se registra en algunas regiones del país, debido a la llegada de El Niño, ha prendido las alarmas de las autoridades.
Redacción Vivir
Así lo dio a conocer el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam), que declaró la alerta roja en 14 departamentos.
Según la entidad, hay una amenaza latente en los cultivos, bosques y pastos de las regiones Caribe, Orinoquia y Andina, principalmente. Sin embargo, la situación más complicada se presenta en el corregimiento de Mulaló, en el municipio de Yumbo, en el Valle del Cauca, donde el fuego ha consumido alrededor de 600 hectáreas de vegetación y cinco viviendas y ha dejado a cuatro bomberos afectados.
Los departamentos en los que hay alerta roja son Bolívar, Boyacá, Cauca, Cesar, Cundinamarca, Huila, La Guajira, Meta, Nariño, Norte de Santander, Quindío, Tolima y Valle.
Además, el Ideam recomendó prestar especial atención en otras zonas de riesgo. El Parque Nacional Natural de la Sierra Nevada de Santa Marta, las reservas de los Rosales y el Ceibal, en Atlántico, y la isla de Salamanca, en Magdalena, hacen parte de los territorios que presentan mayor vulnerabilidad. En esta última hay por lo menos unas 40 hectáreas afectadas.
De acuerdo con el organismo, la mayoría de los incendios que se presentan actualmente son producto de la intervención humana. Quemas de rastrojos por parte de agricultores para preparar nuevos cultivos y las basuras que dejan los visitantes de los bosques hacen parte de las posibles causas de los incendios. Por las altas temperaturas, los desechos pueden generar combustiones espontáneas.
Hasta el momento, en Colombia se han registrado cerca de mil incendios forestales durante 2014. Los territorios más afectados, según información de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, son Boyacá, Cundinamarca y Santander.
Aunque la semana pasada el Ideam informó sobre “una desaceleración en la evolución hacia un fenómeno de El Niño”, también sugirió permanecer alertas ante las posibles eventualidades: “Recomendamos a la comunidad en general y a las autoridades nacionales, regionales y locales, no bajar la guardia y mantener activas las acciones preventivas para reducir el impacto asociado a este evento de variabilidad climática”.
Así lo dio a conocer el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam), que declaró la alerta roja en 14 departamentos.
Según la entidad, hay una amenaza latente en los cultivos, bosques y pastos de las regiones Caribe, Orinoquia y Andina, principalmente. Sin embargo, la situación más complicada se presenta en el corregimiento de Mulaló, en el municipio de Yumbo, en el Valle del Cauca, donde el fuego ha consumido alrededor de 600 hectáreas de vegetación y cinco viviendas y ha dejado a cuatro bomberos afectados.
Los departamentos en los que hay alerta roja son Bolívar, Boyacá, Cauca, Cesar, Cundinamarca, Huila, La Guajira, Meta, Nariño, Norte de Santander, Quindío, Tolima y Valle.
Además, el Ideam recomendó prestar especial atención en otras zonas de riesgo. El Parque Nacional Natural de la Sierra Nevada de Santa Marta, las reservas de los Rosales y el Ceibal, en Atlántico, y la isla de Salamanca, en Magdalena, hacen parte de los territorios que presentan mayor vulnerabilidad. En esta última hay por lo menos unas 40 hectáreas afectadas.
De acuerdo con el organismo, la mayoría de los incendios que se presentan actualmente son producto de la intervención humana. Quemas de rastrojos por parte de agricultores para preparar nuevos cultivos y las basuras que dejan los visitantes de los bosques hacen parte de las posibles causas de los incendios. Por las altas temperaturas, los desechos pueden generar combustiones espontáneas.
Hasta el momento, en Colombia se han registrado cerca de mil incendios forestales durante 2014. Los territorios más afectados, según información de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, son Boyacá, Cundinamarca y Santander.
Aunque la semana pasada el Ideam informó sobre “una desaceleración en la evolución hacia un fenómeno de El Niño”, también sugirió permanecer alertas ante las posibles eventualidades: “Recomendamos a la comunidad en general y a las autoridades nacionales, regionales y locales, no bajar la guardia y mantener activas las acciones preventivas para reducir el impacto asociado a este evento de variabilidad climática”.