El viernes en la tarde, Luis Madriñan, gerente de Gestión Ambiental de Cerrejón, dio a conocer a través de su cuenta de Twitter el asesinato de uno de los nueve jaguares que habitaban en el área protegida DMI Perijá, ubicada entre la Serranía que lleva el mismo nombre y la Sierra Nevada de Santa Marta.
“Hoy les tengo una noticia súper triste. Lamento tener que decirles que hoy me contacto un habitante de Barrancas, La Guajira. Me dijo que en él área protegida DMI Perija mataron a bala a un Jaguar”, relató Madriñan.
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Según el funcionario de Cerrejón, la Corporación Autónoma de La Guajira y la Policía Nacional fueron alertados de inmediato “para que lleven a cabo la respectiva investigación. El informante me contó que los cazadores fueron a buscar al jaguar hasta los bosques del área protegida”. Sin embargo, hasta el momento, Corpoguajira no se pronunciado sobre este hecho.
Los hechos habrían ocurrido en una de las áreas protegidas de la empresa El Cerrejón, que cuenta con 1.950 hectáreas de bosque. Al respecto, Madriñan le había dicho a El Heraldo que “con la implementación de este tipo de acciones, la empresa continúa contribuyendo a la conformación del corredor biológico Wüin Manna, una iniciativa con la que la empresa busca restaurar y proteger más de 25.000 hectáreas de bosque seco tropical. Al tiempo que busca mejorar la biodiversidad de la región, permitiendo la protección de especies de flora en veda y de fauna en estado de amenaza”.
Precisamente, el jaguar era una de estas especias en estado de amenaza. Según el artículo de ese periódico, gracias a las acciones de protección y conservación adelantadas por la empresa los jaguares regresaron a La Guajira luego de casi 50 años. Madriñan contó que a lo largo de los años habían podido identificar nueve de estos felinos. Lastimosamente, uno de estos fue asesinado.
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Hace unas semanas, la WWF presentaba un balance desalentador para estos animales. En Colombia, el área de distribución de la especie ha disminuido aproximadamente un 39%. Su desaparición gradual ha llevado a que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) catalogue a la especie como en estado de Casi Amenaza (NT) en la Lista Roja.
Según esta ONG: “El jaguar es una especie clave para mantener la salud de los ecosistemas, pues además de regular las poblaciones de otros animales al ser el máximo depredador del continente, su necesidad de grandes extensiones de territorio para subsistir lo convierte en una especie sombrilla, es decir, una especie que, al ser protegida, conserva el hábitat de otros cientos de especies que comparten su hogar. En otras palabras, si el jaguar está sano, su ecosistema y el resto de especies que habitan allí, lo están”.