Greta Thunberg critica la nueva política agrícola europea
La ecologista Greta Thunberg, junto con otras activistas por el clima, denunció la nueva Política Agrícola Común (PAC) adoptada el viernes por el Parlamento europeo, que “alimenta la destrucción ecológica”.
“Once meses después de que el Parlamento europeo declarara la emergencia climática, este mismo parlamento votó a favor de continuar con una política agrícola que, en resumen, alimenta la destrucción ecológica con cerca de 400.000 millones de euros” (unos 475.000 millones de dólares), escribió el viernes por la noche en Facebook, en un mensaje firmado con otras cuatro militantes ecologistas.
El Parlamento europeo adoptó el viernes una nueva PAC más “verde” para la Unión Europea, que debe negociar ahora con los Estados, pero las oenegés y muchos eurodiputados consideran muy insuficiente para responder a los desafíos medioambientales y climáticos.
Algunos parlamentarios y numerosas oenegés mostraron su decepción y enfado ante unas subvenciones que seguían apoyando una agricultura intensiva y alentando de forma insuficiente, según ellos, modelos más sostenibles y respetuosos con el medioambiente.
“¿Estamos decepcionadas? No. Porque esto significaría que esperábamos un milagro. Sin embargo, este día demostró una vez más el tamaño de la brecha que existe entre las políticas actuales y lo que habría que hacer para estar en línea con el acuerdo de París” sobre el clima, agregó Thunberg.
“Once meses después de que el Parlamento europeo declarara la emergencia climática, este mismo parlamento votó a favor de continuar con una política agrícola que, en resumen, alimenta la destrucción ecológica con cerca de 400.000 millones de euros” (unos 475.000 millones de dólares), escribió el viernes por la noche en Facebook, en un mensaje firmado con otras cuatro militantes ecologistas.
El Parlamento europeo adoptó el viernes una nueva PAC más “verde” para la Unión Europea, que debe negociar ahora con los Estados, pero las oenegés y muchos eurodiputados consideran muy insuficiente para responder a los desafíos medioambientales y climáticos.
Algunos parlamentarios y numerosas oenegés mostraron su decepción y enfado ante unas subvenciones que seguían apoyando una agricultura intensiva y alentando de forma insuficiente, según ellos, modelos más sostenibles y respetuosos con el medioambiente.
“¿Estamos decepcionadas? No. Porque esto significaría que esperábamos un milagro. Sin embargo, este día demostró una vez más el tamaño de la brecha que existe entre las políticas actuales y lo que habría que hacer para estar en línea con el acuerdo de París” sobre el clima, agregó Thunberg.