Gildardo Urrego, un apicultor de Antioquia, perdió 10 de sus 19 enjambres en 2019. Ahora, cuatro de sus colmenas desaparecieron y cada una albergaba unas 50.000 abejas. Urrego sospecha que detrás de esta mortandad están los agrotóxicos que se usan en los cultivos. ¿Qué tan cierto es que las están acabando con fipronil, un insecticida que ya fue prohibido en la Union Europea?