La biodiversidad en tiempos de paz

En el Gran Foro de la Biodiversidad: “La investigación científica por un desarrollo sostenible” se dialogará sobre el potencial de este recurso para la paz y la economía. Además se dará un adelanto de cómo van las expediciones BIO de Colciencias. Estos son algunos de los panelistas invitados.

Redacción Medio Ambiente
13 de septiembre de 2016 - 03:00 a. m.
Sandra Bessudo, directora ejecutiva Fundación Malpelo; Yaneth Giha, directora de Colciencias; Hernado García, subdirector científico, Instituto Alexander von Humboldt; Monique S.J. Simmonds, directora encargada de ciencias, Royal Botanic Gardens Kew / Cortesía.
Sandra Bessudo, directora ejecutiva Fundación Malpelo; Yaneth Giha, directora de Colciencias; Hernado García, subdirector científico, Instituto Alexander von Humboldt; Monique S.J. Simmonds, directora encargada de ciencias, Royal Botanic Gardens Kew / Cortesía.

HERNANDO GARCÍA
Subdirector científico, Instituto Alexander von Humboldt

¿Cuáles han sido los principales obstáculos en Colombia para hacer exploración científica e investigar la biodiversidad?

El estudio científico de la biodiversidad en Colombia ha sido un gran reto con múltiples obstáculos. Lograr posicionar en la mente de los tomadores de decisiones y de la sociedad, en general, la importancia del estudio de la biodiversidad es el primero de ellos. No ha sido fácil sensibilizar sobre la conexión vital de la sociedad con la naturaleza. Como consecuencia, la falta de incentivos económicos al fortalecimiento técnico y a la investigación ha sido un segundo obstáculo. Somos un país megadiverso, con una de las mayores riquezas de especies del planeta. Lograr explorar esta biodiversidad y determinar su importancia para el bienestar de la sociedad requiere de una inversión de recursos que sobrepasa al apoyo recibido por el Gobierno y la sociedad.

Finalmente, la guerra ha sido un gran obstáculo. Colombia está lleno de territorios que han estado cerrados para la sociedad, incluida la comunidad científica. Territorios que aún tienen una gran naturalidad y un buen estado de conservación. Desconocemos su importancia para el mantenimiento de especies endémicas y amenazadas, para el mantenimiento de servicios ecosistémicos (como la regulación del clima y del agua) y para el mantenimiento del modo de vida de pobladores locales. Es evidente que una Colombia en paz nos abre la puerta a estos territorios, donde como generadores de conocimiento científico debemos aportar para que se tomen las decisiones más acertadas en los nuevos modelos de desarrollo que se estarán planteando para estos territorios de paz.

MONIQUE S.J. SIMMONDS
Director encargada de ciencias, Royal Botanic Gardens Kew

¿Cuál es el potencial económico de la biodiversidad colombiana?

Esta es una pregunta muy difícil de responder con un valor en dinero. Pero sí puedo decir que la biodiversidad tiene un gran valor para el turismo, donde será clave su protección y el mantenimiento de los hábitats. Además hay otras áreas importantes, como las plantas que podrían desarrollarse en productos para la salud de millones: esta es una posibilidad real que el país tiene. La gente suele pensar que pertenece a las grandes compañías multinacionales, pero los mayores beneficios se encuentran en un nivel comunitario que puede permitir a las comunidades locales mejorar los ingresos.

También existe un potencial en el comercio de madera. Colombia tiene una gran diversidad de plantas sin explotar con el potencial para apoyar la economía: una clave para esta realización es saber lo que tiene y desarrollar de una estrategia de corto plazo (productos alimenticios, aceites esenciales, cosméticos) y el potencial a largo plazo (como los fármacos derivados de plantas).

Lo bueno es que Colombia está abriendo sus puertas a los colaboradores académicos y empresas comerciales, así como al establecimiento de los institutos de investigación para dirigir estos indicativos de biodiversidad. No me sorprendería ver una mayor gama de productos colombianos en los próximos 10 años.

YANETH GIHA
Directora de Colciencias

¿Cuál ha sido el papel de la investigación científica para proteger la biodiversidad colombiana?

Colombia es considerada el segundo país con mayor biodiversidad por metro cuadrado del planeta, el 53 % de la superficie continental está cubierta por bosques naturales y cuenta con 311 tipos de ecosistemas continentales y marinos diferentes. Por eso, a través de la investigación científica se ha fortalecido el nuevo conocimiento y permitido la apropiación social de la ciencia, con el propósito de preservar, cuidar e investigar de forma sostenible la enorme riqueza de los ecosistemas colombianos, que son un tesoro para el desarrollo social del país.

Con este fin, en Colciencias fomentamos la investigación científica con calidad y pertinencia, que incrementa la producción de nuevo conocimiento en torno a la biodiversidad a través del proyecto nacional Colombia Bio, que busca generar condiciones para conocer, preservar y conservar la biodiversidad por medio de la exploración en diferentes territorios del país, que fortalezcan las colecciones biológicas y la librería genética de la biodiversidad colombiana.

SANDRA BESSUDO
Directora ejecutiva Fundación Malpelo

¿Cómo se puede aprovechar la biodiversidad marina para el desarrollo económico?

El valor de la biodiversidad se puede considerar desde distintos puntos de vista. En primer lugar, las especies vegetales y animales son la fuente de alimento de la especie humana. Además, la biodiversidad marina es una gran fuente para el desarrollo económico, desde los recursos que se generan por ecoturismo, ya sea a través de actividades de buceo, careteo o avistamientos de especies en superficie.

La biodiversidad también tiene valor científico, ya que su estudio aporta conocimientos acerca de los procesos biológicos y del funcionamiento de los ecosistemas, y un valor estético, pues la observación de la naturaleza permite apreciar y disfrutar los resultados de millones de años de evolución biológica. El valor ético también es importante y consiste en reconocer el derecho del ser humano a hacer uso de la diversidad biológica y la obligación de respetar a las otras especies que conviven con él.

Por Redacción Medio Ambiente

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