La organización estadounidense Four Paws denunció que a una leona de 14 meses, llamada Falestine, le amputaron las garras con unas tijeras de jardín para que pudiera jugar con los niños que visiten el lugar. Según su página web, este suceso ocurrió en el zoológico de Rafah en la Franja de Gaza, del cual aseguran “es un verdadero zoológico de tristezas. Los animales están malnutridos y enfermos, sufren en jaulas estériles, mientras que los animales muertos han sido rellenados y levantados para atraer visitantes". (Lea: Un día para acordarse del perro callejero, un amigo invisibilizado)
El veterinario que operó a Falestine explicó que "las garras se cortaron para que no crecieran rápido y los visitantes y los niños pudieran jugar con ella”. Además, Four Paws denuncia que debido a los frecuentes ataques militares, han sido asesinados y mutilados muchos animales en los últimos 15 años. Y, las precarias condiciones en las que se encuentra el zoológico han agravado la situación de los animales reclutados.
“Lo que hicimos fue reducir la agresión de la leona para que pueda ser amigable con los visitantes”, aseguró a The Daily Mail Mohammed Jumaa, propietario del lugar. Por tal razón, los animalistas han mostrado su preocupación ya que, para ellos, este tipo de tratamientos somete al animal a un dolor insoportable y cruel. (Puede leer: Retratan a perros víctimas de maltrato animal)
Four Paws también denunció otro caso ocurrido el mes pasado, "cuando cuatro cachorros de león se congelaron hasta morir debido a la falta de un refugio adecuado y un clima inusualmente frío en la región”. Para evitar este tipo de situaciones, la organización, creo un canal para poder recibir las donaciones de las personas y poder encontrar un sitio de rehabilitación para curar a los animales maltratados y trasladarlos a un santuario, donde puedan ofrecerle una mejor calidad de vida.