Según explicó la Fiscalía General de la Nación, gracias a su intervención, un juez ordenó el cierre de una carretera ilegal que habían creado hace seis meses en el Amazonia. El área afectada, ubicada entre Puerto Flores, en zona rural de San José del Guaviare; y el río Inírida, en límites con El Retorno (Guaviare), estaba en inmediaciones del resguardo indígena Nukak Makú y era utilizada por los grupos disidentes de alias Gentil Duarte. (Lea: Trochas en el Caquetá, una vía libre hacia la deforestación)
“La labor investigativa de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía, con apoyo de la Dirección de Protección y Servicios Especiales de la Policía Nacional (DIPRO) y la Fuerza Aérea Colombiana, que realizó sobrevuelos y monitoreos en el área afectada, permitió identificar un corredor clandestino de algo más de 30 kilómetros”, señala la Fiscalía.
La evidencia indica que la trocha fue creada para mover insumos químicos y otros elementos necesarios para el procesamiento de estupefacientes. Durante su apertura, evidentemente, se deforestaron varias hectáreas, “levantando viviendas artesanales y conformando asentamientos para, supuestamente, acaparar terrenos e intentar formalizar el uso de la vía”. (Acá: El 68 % de la Amazonia protegida está amenazada)
Además de ordenar el cierre de la vía, el juez de control de garantías solicitó la destrucción de dos puentes de madera y pidió tanto a autoridades como a la fuerza pública, ejercer acciones preventivas y de control para evitar que sea aprovechada.
Según el último informe de deforestación publicado por el Ideam, en el 2019 en Colombia se deforestaron 158.894 hectáreas. Aunque la tasa de deforestación disminuyó un 19.2% comparado con años anteriores, en la Amazonia se sigue concentrando el 62% de la tala en el país. (Lea: Colombia deforestó 158.894 hectáreas en 2019)