Durante la Convención sobre Comercio Internacional de Especies de fauna y flora salvajes en peligro de Extinción (CITES), que se celebra este año en Ginebra, se estableció que se prohíbe el comercio de la nutria enana y la asiática. Las selfies con estas especies y su tráfico como mascotas han acelerado la reducción en su población. (Lea: ¿Por qué tomarse selfies con nutrias amenaza la existencia de estos animales?)
Estos animales son muy populares en algunos países asiáticos, sobre todo en Japón en donde hay instalados unos "cafés de nutrias", en los cuales los clientes pueden tocarlas y hacerse selfies con ellas. En estos locales se les ofrece a los clientes comprar pequeños trozos de comida para darle a los animalitos enjaulados y tomarse fotos con ellos mientras toman una taza de café.
Estos son algunos puestos de café de nutrias que se han vuelto muy populares en Japón. / AFP
"Estas zonas son un ambiente anormal para ellas y que, al ser domésticas, ya no viven en comunidad y tienen poco acceso al agua", denuncia Cassandra Koenen, de la ONG Wildlife not Pets. Además, las nutrias son utilizadas como mascotas. En Japón una cría puede llegar a cotizar los 10.000 dólares. Unas prácticas que son promovidas por redes sociales de manera irresponsable, porque no informan a las personas que estos animales, que son salvajes, despiden un fuerte olor y tienden a morder, por eso como mascotas son inadecuadas, añade la ambientalista.
Estas modas han acelerado su desaparición, por tal razón, todas las especies de nutrias de Asia están consideradas desde hace tiempo como vulnerables o amenazadas, a causa de la disminución de su hábitat natural y el comercio ilegal de sus pieles. Su población se ha reducido al menos un 30 % en los últimos 30 años.
Los protectores de los animales destacan que no son animales adecuados para vivir en cautiverio. Extrañan su entorno, el agua en particular. (Puede leer: Buenas noticias de un censo de nutrias en la Orinoquía)
Las nutrias no son la única especie afectada por esta moda. Entre las 56 propuestas presentadas a la CITES reclamando una mayor protección, 22 conciernen a especies como todo tipo de lagartos, tortugas y arañas, que también son cazados en el marco de este comercio multimillonario.