El presidente de Chile, Sebastián Piñera, descartó de nuevo que los 33 mineros atrapados desde hace más de un mes en el norte del país vayan a celebrar el Bicentenario de la Independencia del país, el 18 de este mes, en el exterior del yacimiento.
El mandatario reiteró así que el rescate de los mineros, que está en marcha, será un proceso lento.
"Hemos golpeado todas las puertas, hemos buscado todas las tecnologías, hemos pedido ayuda a países vecinos, hemos puesto la mejor maquinaria y los mejores expertos para rescatar con vida a nuestros mineros. Pero, desgraciadamente no podrán celebrar con nosotros el Bicentenario", dijo el mandatario.
Las declaraciones las hizo Piñera al visitar unas obras viales en Santiago, cuyos trabajadores le entregaron una bandera que ellos elaboraron para que sea entregada a los mineros, lo que según aseguró el mandatario, hará personalmente.
"Voy a llevar esta bandera que mandan los trabajadores chilenos, que ustedes representan, a los 33 mineros que están atrapados en las profundidades de la montaña", anunció.
Desde las últimas horas del domingo se incorporó al rescate de los mineros una segunda máquina, una "Schramm T'130", que tiene la misión de ensanchar una de las sondas de comunicación con los mineros, que están a 700 metros bajo tierra, para que sea utilizada como eventual vía de evacuación de los atrapados.
Esta máquina es considerada más rápida que la "Strata 950", que ha cavado ya cerca de 70 metros de un primer conducto de evacuación y los familiares de los mineros confían en que pueda acortar el plazo del rescate, al punto que la han apodado "La Milagrosa".
El ministro de Minería, Laurence Golborne, reiteró a los periodistas que los mineros serán llevados a la superficie a comienzos de diciembre y, en el mejor de los casos, en la segunda mitad de noviembre.