Volkswagen, la marca alemana de automóviles representada en el ámbito local por Porsche Colombia, divulgó su proyecto de movilidad más importante en el país: promover el uso, o aumentar las mezclas, de bioetanol en la gasolina.
Sobre el bioetanol, también conocido como etanol, la marca señala que “es un combustible de bajas emisiones”. Se considera, agregan, como alcohol carburante que se puede obtener a partir de procesos industriales usando, por ejemplo, caña de azúcar y maíz como materia prima.
Se trata de un proyecto ambicioso. Su impacto, aseguran desde VW, beneficiaria a la movilidad, al medio ambiente y a la economía nacional, mientras generaría empleos en el agro.
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En diálogo con El Espectador, Juan Felipe Bedoya, gerente general de Porsche Colombia, habló sobre el plan que ya da sus primeros pasos en el país, con la llegada de tres vehículos Total Flex, fabricados para funcionar con altas mezclas de bioetanol o solamente con este carburante, delegados de la idea que, esperan, se materialice en los próximos años.
¿Cómo beneficiaría el bioetanol a la reducción de emisiones?
El bioetanol en Colombia, de acuerdo con estudios contratados por Porsche Colombia y US Grains Council, reduce las emisiones del sector automotor hasta en un 75 % cuando se compara con gasolina. Este cálculo considera las emisiones generadas en el proceso productivo del combustible: gasolina o bioetanol y, también, el uso de ese combustible en un vehículo compacto.
¿Cuál es la mezcla presente en la gasolina de los colombianos?
Las normativas colombianas definieron hace ya varios años una mezcla de 10 % de bioetanol en la gasolina, lo cual ha sido habitual en Colombia. Sin embargo, recientemente y debido a diferentes factores, entre los que se incluye la falta de una producción suficiente y continua, se ha reducido temporalmente este lineamiento, de manera que hoy la mezcla no excede el 6 %.
¿Un carro puede funcionar al 100 % con bioetanol?
Sí, para los vehículos equipados con tecnología conocida como Total Flex. Estos vehículos reciben hasta el 100 % de bioetanol, lo que representa una reducción de más del 70 % de las emisiones, en Colombia (según la calidad del bioetanol y la matriz energética, entre otros factores). No hay que dejar de lado que esta tecnología es aplicada por la gran mayoría de marcas de la industria automotriz en Brasil, marcas que suelen ser importadas a Colombia desde dicho país.
Háblenos sobre la hoja del ruta de bioetanol
Una de las tareas que tenemos en nuestro país es iniciar a construir una hoja de ruta del bioetanol que nos permita llegar a acuerdos entre los diferentes stakeholders de esta iniciativa y, de esta manera, definir los siguientes pasos para caminar sobre una senda concreta de descarbonización del sector de transporte. Por otro lado, empresas de tecnología automotriz, como es el caso de Bosch, que han desarrollado sistemas de Total Flex, ya están trabajando en kits de retrofitting para adaptar un carro de sus características habituales, de manera que pueda recibir mayores mezclas de bioetanol.
¿Qué otros beneficios encuentra Colombia en el bioetanol?
Además de la reducción de emisiones de CO2 y de material particulado, este proyecto también tendría grandes resultados sociales y económicos. Basados en la cantidad de hectáreas de caña de azúcar que se trabajarían para producir el bioetanol estimado en nuestro estudio, alrededor de 350.000 hectáreas, podemos inferir que se generarían al menos 100.000 oportunidades para la economía popular con beneficios en las comunidades rurales. Vale la pena aclarar que dichas hectáreas no afectarían la frontera agrícola ni supondrían deforestación de ningún tipo.
Por otro lado, Colombia, a pesar de ser exportador de petróleo, es importador de gasolina en cantidades importantes. Entonces, cada galón de bioetanol podría ser un galón que dejemos de importar. La producción local de bioetanol se podría suplir con una producción ampliada de esa demanda, lo que representa aspectos positivos para la balanza cambiaría del país.
¿Cómo es el proyecto para que en el país se aumente el porcentaje en la mezcla?
Este proyecto tiene varios hitos importantes: en primer lugar, queremos promover la reglamentación de mezclas voluntarias de bioetanol en Colombia, lo que significa que cualquier usuario se pueda acercar a una estación de servicio y decidir qué porcentaje de bioetanol quiere usar en su vehículo; incluso podría ser de hasta el 100 %, si su vehículo cuenta con la tecnología necesaria. Por otro lado, queremos abrir la discusión para que la mezcla obligatoria de bioetanol, que hoy es teóricamente del 10 %, en la gasolina aumente, desde el 6 % actual hasta un nivel acordado con todos los involucrados. Ahora bien, esa mezcla es del 27 % en Brasil y alrededor del 20 % en India, el país debe discutir cómo podríamos evolucionar a mezclas que representen menores emisiones.
Sin embargo, para que estos dos puntos se den, es necesario contar con una producción estable y constante de bioetanol en el país. Asegurar las mezclas es indispensable. Por eso, otro hito estratégico es promover la producción de este combustible de bajas emisiones en nuestro país.
¿Cómo ha sido la respuesta del Gobierno Nacional?
El proyecto del bioetanol responde y concuerda con los objetivos de transición energética y movilidad sostenible del Gobierno actual. Las cifras lo respaldan. En Colombia, un vehículo al 100 % de bioetanol emite 44,7 gramos de CO2 por kilómetro. En Europa, un vehículo 100 % eléctrico emite 66,5. Esto se debe a que el bioetanol es un combustible de bajas emisiones, pero también a nuestra limpia matriz energética.
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Con esta información, respaldada por un estudio serio, podemos afirmar que cada persona que se ha sentado a oír esta propuesta ha decidido apoyarla de una manera u otra. Hemos hablado con altos cargos del Ministerio de Minas y Energía, con senadores, representantes a la Cámara, académicos, universidades, empresa privada… de hecho, el tema de los biocombustibles ya figura en el documento del Plan Nacional de Desarrollo. Ahora, queremos llevarles este mensaje a los ministros de Medio Ambiente, de Agricultura, de Hacienda y de Comercio y, por qué no, al señor presidente de la República.
¿Qué pruebas harán en Colombia y cuál es su objetivo?
Los vehículos Total Flex que llegaron al país —un T-Cross, un Nivus y un Saveiro de Volkswagen— no tienen fines comerciales. Vienen para ser medidos y puestos a prueba en el territorio colombiano. En cerca de cinco meses recorrerán más de 100.000 kilómetros. Nuestro objetivo es que recorran el país y sean tanqueados 100 % con bioetanol colombiano que los productores locales van a aportar en este proyecto y la Organización Terpel lo va a distribuir. Vamos a demostrar que este biocombustible funciona más allá del papel, en la topografía colombiana… que permite un gran rendimiento y que, efectivamente, contamina menos.
