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BMW Serie 1, el placer de la ?conducción

Un deportivo que se creció en dimensiones y al que se lo montó un motor 1.6 de gran eficiencia y pique. Un auto que permite disfrutar las nuevas propuestas tecnológicas de la casa ?alemana.

El Espectador
29 de mayo de 2012 - 06:03 p. m.

No necesariamente un auto deportivo tiene que sacrificar el espacio. Y eso lo entendieron a la perfección los creadores de la Serie 1 de BMW, que en sus versiones Urban y Sport, da un paso adelante en el segmento de los compactos, presentando un modelo con dimensiones más generosas, que lo hacen más confortable, sin olvidar la eficiencia de sus propulsores, que a fin de cuentas es algo fundamental para quienes gustan de este tipo de vehículos.?

Es claro que ahora los ocupantes gozan de un mayor espacio. La carrocería es 85 milímetros más larga en comparación con el modelo anterior, distancia entre ejes 30 milímetros mayor y el ancho de vía mayor (delante 51 mm más, detrás 72 mm más). Sin duda, los pasajeros de las plazas traseras serán los más beneficiados (21 mm más para las rodillas). Además, la capacidad del equipaje aumentó a 360 litros, la cual puede llegar hasta 1.200 litros si se abaten las asientos de la parte posterior, pero quizás el mayor descreste se da al momento de encender su motor. Incluso, por su rendimiento, quien no conozca mucho de la historia del modelo bien podría equivocarse y pensar que no está en un 1.600 c.c. sino en un vehículo de una cilindrada superior. ?

Se ve que los ingenieros fueron juiciosos en su tarea y que lograron sacarle el mayor rendimiento al propulsor y que el turbo está cumpliendo a cabalidad con sus funciones (la versión anterior montaba uno atmosférico). Es así como los 136 caballos se pueden sentir con placer a las 4.300 revoluciones por minuto, al igual que su torque, que es de 220 newton-metro y el cual se puede experimentar desde las 1.350 hasta las 4.300 rpm. No en vano, llega a los 100 kilómetros por hora en tan sólo 8,5 segundos y su velocidad máxima es de 210 kilómetros por hora.?

Estos propulsores, de cuatro cilindros, vienen con la tecnología Twin Power Turbo, propia de la marca, que tiene como finalidad aumentar la potencia de la máquina, algo que se ve representado en cifras, como quiera que se pasó de 122 a 136 caballos, pero lo más importante, pese a crecer en dimensiones, el peso del vehículos se mantuvo en 1.365 kilogramos. ?

Si bien a quienes les gusta el pique el tema del ahorro de combustible podría ser un tema secundario, en esta nueva serie cuenta con un elemento que puede ayudarles y que con el tiempo podría entender que no sólo beneficia su bolsillo sino que además contribuye con el cuidado del medio ambiente. Se trata de la función star-stop, la cual apaga de manera automática el motor cuando el auto se detiene en un semáforo y se activa de inmediato con el simple hecho de tocar el embrague. Si bien al comienzo hay una reacción al rechazo, por la falta de costumbre, cuando uno se concientiza de la función que está cumpliendo, termina por valorarlo. Pero si definitivamente no se acostumbra a la misma, la función se puede desconectar pulsando un botón.?

En este mismo sentido, el conductor cuenta con el modo Eco-Pro, una tecnología inteligente a la mano, a la cual se activa también con un botón y motiva al conductor, que recibe información sobre la eficiencia, al utilizarlo. Al ser activado, la curva característica del motor se modifica, el pedal del acelerador responde con más suavidad, la transmisión automática de manera más veloz y la potencia del climatizador y de la calefacción del asiento se reducen ligeramente. Según un estudio realizado por la marca alemana, cuando se utiliza el modo Eco, dependiendo el estilo de conducción, se puede lograr un ahorro máximo de hasta el 20%, algo que difícilmente se podría conseguir sin esta ayuda. ?

En el tema de transmisiones también hay una novedad y es que es el único vehículo compacto que tiene la opción de equiparse con una caja automática de ocho velocidades. Si no se quiere este paso adelante, monta de serie una caja mecánica de seis marchas, muy eficiente, y que se complementa muy bien con el propulsor. ?

Interiormente responde a las exigencias y cumple a cabalidad con las expectativas propias de un auto de su clase y dentro de las nuevas propuestas está el cuadro de mandos orientado hacia el conductor y una pantalla plana central que sobresale en el tablero y que es la que brinda información del equipo de audio y de las diferentes funciones del vehículo. El tablero combina texturas de aluminio con una línea de color rojo, que le imprimen un carácter especial. ?

Cuenta con un espacio generoso para guardar objetos en las puertas y con una amplia guantera, dos portavasos, consola central, con un mando para operar las diferentes funciones de conectividad y sistemas del vehículo. El puesto del conductor viene equipado con múltiples configuraciones y el timón y los asientos son de diseño deportivo y en ellos también sobresalen costuras de color rojo, que van acorde con todo el conjunto del interior. ?

En resumen, es un auto que cumple a cabalidad con lo que promete: “Un verdadero placer al conducirlo”.

Por El Espectador

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