El Porsche Cayenne llegó a su segunda generación. Y lo hace con un objetivo definido, que por dondequiera que vaya, sea identificado como uno más de la familia deportiva de la marca alemana.
Para ello, sus creadores tomaron mucho de los trazos de los autos tradicionales de Porsche, y su frente, al igual que la parte posterior, es mucho más bajo, llevando el emblema en el capó. El interior, entre tanto, tomó las bases del Panamera.
Si bien en los mercados europeos se presentaron cinco versiones, una de ellas la del híbrido, a Colombia llega inicialmente el V8 de 4.8 litros y 400 caballos de potencia (15 más que su antecesor) y una caja de ocho velocidades, con un precio de introducción de US$151.000. Para el mes de octubre se espera la llegada del V6 y, posteriormente, del diésel.
Otra de las novedades que trae esta versión es la reducción en el consumo de combustible y en las emisiones de gases contaminantes que, según el fabricante, están alrededor del 23 y 26%, respectivamente.
Además, para mayor comodidad interior, se aumentó la distancia entre ejes en 40 milímetros y la longitud en 48 milímetros.