En Hyundai están de plácemes con la llegada de una nueva estrella: el i35, una evolución del que fuera conocido en el país como el Elantra y que se constituye en un nuevo paso de la renovación del portafolio de la casa coreana, en el que el diseño, la tecnología y el cuidado del medio ambiente ocupan lugares prioritarios
Con este modelo, que tuvo como base el concepto de diseño conocido como ‘Wind Craft’ (el arte del viento), Hyundai pretende competir con argumentos en el segmento de los sedanes compactos, tal como lo está haciendo desde hace cinco meses en los mercados de China y Estados Unidos, en los que ya está en los primeros lugares de venta.
Con el i35, Hyundai, como ya lo mostró en otros modelos, sale de lo convencional, con un diseño futurista y tomando prestados muchos elementos de los autos deportivos y cupés, además de la parrilla hexagonal que ya se convirtió un en un sello de la marca y que ha servido para darles identidad a los nuevos miembros de la familia.
Frente a su antecesor (el Elantra), el i35 cambió en sus medidas. Para comenzar y con el ánimo de lograr un mejor comportamiento aerodinámico, que se ve reflejado en un menor consumo de combustible, se bajó la altura del vehículo a 1.445 milímetros. Por otro lado, para dotarlo con un mayor espacio en el habitáculo, se amplió la distancia entre ejes en 50 mm (2.700 mm) y el largo en 35 mm (4.530 mm), mientras que el ancho se mantuvo.
En Colombia, el i35 se comercializará con dos motorizaciones: 1.8 y 1.6 litros, acoplados a transmisiones automáticas y manuales de seis velocidades. El de 1.8 litros multipunto inyectado (MPI) es un motor de cuatro cilindros con 150 caballos de potencia a 6.500 revoluciones por minuto, el cual se ofrece con control variable de apertura de válvulas doble (D-CVVT); el 1.6, es un motor Gamma, con D-CVVT que genera 130 caballos a 6.300 rpm.
La dirección es asistida eléctricamente (no le quita energía al motor) y dependiendo de la versión y equipamiento se puede contar hasta con seis airbags. De igual manera, tiene funciones avanzadas para el segmento, tales como faros de seguridad trasera que permanecen encendidas 30 segundos después de que el conductor sale del auto, un sistema ionizador que purifica el aire de la cabina y lo desodoriza, así como también un sistema para despejar la niebla.
El modelo 1.6, en su versión básica, arranca en $40 millones y el 1.8 en $44 millones.