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Hay una tendencia mundial por unir conceptos y generar productos nuevos. En algunos casos las marcas aciertan y en otros muy contados elaboran productos que se pueden considerar clásicos desde su nacimiento.?
Desde que la marca ítalo-sueca Husqvarna fue comprada por el grupo BMW hace cinco años, el público especializado reconoció esta movida como la respuesta de los alemanes a la buena gestión que venían haciendo los austriacos de KTM.?
Por eso en principio se dedicaron a mejorar las motos hasta 500 cc para las competencias de Enduro, motocross, rally-raid y supermotard. Adicionalmente, desde hace dos años tanto BMW como Husqvarna estaban madurando la idea de crear un producto que fusionara lo mejor de la tecnología alemana con lo mejor del diseño italiano. Y el año pasado se hizo el milagro: nació la Husqvarna Nuda 900 y 900R.?
A la vista, tiene buena pinta con los carenajes apenas insinuados que dejan ver la poderosa maquinaria del motor BMW bicilíndrico proveniente de las F800, pero con aumento de potencia hasta llegar a los 105 caballos y un torque de 100 Nm. ?
Al tacto, para mitigar las vibraciones del motor, Husqvarna modificó el mecanismo único de árbol contrarrotante para adaptarse al nuevo diseño de cigüeñal, conservando al mismo tiempo el sistema de lubricación por cárter seco y el diseño de los cilindros con una inclinación de 30º hacia delante. A pesar de su deportivo depósito de combustible de 13 litros (debajo de la silla), con esta Nuda se pueden obtener más de 260 km de autonomía.?
Tomando como punto de partida el chasís de acero tipo Trellis del modelo F 800 GS, Husqvarna redujo su longitud en 50 mm, añadió una pipa de dirección de 80 mm más rígida y disminuyó el ángulo de dirección para conferir a la Nuda una mayor agilidad a poca velocidad. Para crear una motocicleta más apta para la vida urbana o para hacer turismo, la Nuda 900 tiene horquillas delanteras Sachs de 48 mm ajustables en precarga y un mono-amortiguador trasero Sachs completamente ajustable.?
En la calle, esta moto brilla por su agilidad en el tráfico pesado; mientras que en carretera se disfruta su andar gracias a la suavidad del motor y la posición de manejo. Eso sí: como buen producto europeo y, en especial, del grupo BMW, las suspensiones son rígidas, enfocadas hacia la deportividad, y el asiento un poco más duro de lo deseado.?
A la vista, además del llamativo diseño exterior de muy buen gusto, el cuadro de instrumentos es básico pero completo y salvo por la pantalla digital (que informa la velocidad, la temperatura del motor y del medio, el cuentakilómetros total y parcial, y la autonomía de combustible) su sencillez y luces testigo hace recordar motos de otra época.?