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Era julio de 1940. El año anterior se había desatado la Segunda Guerra Mundial. El ejército estadounidense buscaba un vehículo para reemplazar las motocicletas y los Ford modelo T, que ellos mismos habían modificado para sus propósitos militares. La máquina solicitada debía ser de reconocimiento ligero, sin embargo, también tenía que contar con la resistencia y el rendimiento necesarios para transportar soldados y cargar algunas de sus armas. A la contienda se presentaron las marcas Willys-Overland, American Bantam Car Manufacturing Company y, unos días más tarde, se uniría Ford Motor Company.
Las automotrices contaban con pocos días para crear un prototipo que se ajustara a las especificaciones de las fuerzas militares. Willys-Overland diseñó el Willys Quad, Bantam creó el BRC modelo 40 y Ford desarrolló el GP, conocido como Pygmy o Pigmeo.
Cada compañía entregó su ejemplar al ejército el verano de ese mismo año y recibió la aprobación para la producción de 70 vehículos de muestra. En marzo de 1941 los militares asignaron una nueva ronda de contratos. Bantam produciría 1.500 vehículos BRC modelo 40, Ford 1.500 Pigmeos GP modificados y mejorados, y Willys, 1.500 Quads.
Después de las pruebas y evaluaciones de los vehículos, el ejército decidió que Willys sería el principal fabricante. Unos meses después, la mayoría de los Bantams y GP de Ford fueron enviados a Gran Bretaña y a Rusia como parte de un programa de préstamo-alquiler.
Al Willys Quad se le hicieron algunas mejoras, convirtiéndose en el MA y más tarde en el MB. Sin embargo, el ejército estadounidense y el mundo lo llamaban Jeep. Hay quienes afirman que el nombre proviene de la pronunciación de las iniciales GP, abreviatura empleada por los militares para general purpose o propósitos generales. Otros dicen que el vehículo fue denominado así debido al personaje de la popular serie animada Popeye, llamado Eugene the Jeep.
El nombre ingresó en el léxico de los estadounidenses y, por un tiempo, sirvió como un título genérico para cualquier vehículo todoterreno. Asimismo, la resistente máquina de color verde sería reconocida como un ícono de la guerra.
Al finalizar la Segunda Guerra Mundial, Willys registró el nombre de Jeep y decidió convertir el vehículo en utilitario todoterreno para los granjeros; el primero de ellos fue llamado Universal Jeep de uso civil. La compañía hizo todas las propagandas necesarias para que el mundo reconociera a Willys como la creadora del vehículo.
Setenta años después Willys pasó a ser Jeep, una multinacional que ha producido más de 15 millones de vehículos todoterreno y urbanos.
El carro de los cafeteros
La llegada de los Willys a Colombia se dio a raíz de los intercambios que hubo de estos autos por café, por esta razón es que el vehículo es un emblema de las familias productoras de la región cafetera. Otros modelos que se introdujeron en el país fueron las versiones militares que usó el Ejército colombiano.
Durante años estos autos se ensamblaron en Colombia. Según Andrés Aguirre, gerente de Chrysler Colombia, la región donde más se vendían y donde se les rendía culto era el Eje Cafetero. “De hecho, todavía hay algunos modelos de aquella época que ruedan en las carreteras. El vehículo se dejó de ensamblar en el país y sus usuarios continuaron dándole mantenimiento por su cuenta. En 1992 comenzó la importación formal con un distribuidor independiente, que estuvo hasta 2003; luego la distribución pasó a ser de la fábrica, que en ese entonces era Daimler Chrysler. En 2007 se separaron las dos marcas a nivel mundial”.
Las ventas del nuevo Willys, llamado ahora Wrangler, siguen siendo significativas. “Pusimos en las carreteras unas 300 unidades. Cada día encontramos gente más apasionada con este modelo”, asegura Aguirre.