En las primeras horas del día o tras largos periodos de inactividad, muchos conductores se preguntan si realmente es necesario calentar el motor del carro antes de emprender la marcha. Aunque es una práctica común entre quienes cuidan su vehículo, no siempre está claro el propósito real de esta acción ni el tiempo que debe dedicarse.
Este hábito, heredado de generaciones anteriores, ha evolucionado con los avances en la tecnología automotriz, lo que plantea una revisión sobre su conveniencia en los vehículos modernos.
Carlos Badillo, asesor experto de Renault, explica que existen dos razones fundamentales por las cuales sigue siendo recomendable calentar el motor antes de iniciar la marcha. La primera, que considera la más importante, es permitir que las piezas móviles del motor reciban una adecuada lubricación antes de estar sometidas a esfuerzos mecánicos. “Este proceso inicial ayuda a evitar un desgaste prematuro, especialmente en las partes más sensibles del motor”, enfatiza.
La segunda razón está relacionada con el rendimiento: “cuando el motor alcanza su temperatura óptima de funcionamiento, puede entregar su máxima potencia y aprovechar de forma más eficiente tanto el combustible como sus propios componentes internos”, destaca Badillo.
Para el experto de Renault, omitir este proceso puede generar consecuencias mecánicas importantes. Si el motor arranca y comienza a trabajar sin que la bomba de lubricación haya distribuido correctamente el aceite, es probable que algunas piezas —en especial las ubicadas en la parte superior del motor— operen en seco durante los primeros segundos. Esto se debe a que, por efecto de la gravedad, estas zonas no conservan suficiente lubricante al momento del encendido, lo que puede acelerar su desgaste.
Badillo también señala que muchos conductores aún conservan la idea de que los vehículos deben calentarse como una obligación, en parte porque los motores antiguos, alimentados por carburador, sí requerían alcanzar cierta temperatura para funcionar de manera eficiente. En aquellos casos, calentar el motor evitaba que el carro se sintiera lento o falto de respuesta. Sin embargo, el especialista destaca que, en los vehículos actuales equipados con sistemas de inyección electrónica y sensores que optimizan la mezcla de aire y combustible, esta pérdida de potencia inicial ya no es tan evidente.
Aun así, Badillo insiste en que conviene dejar el motor en ralentí durante un máximo de dos minutos antes de iniciar la marcha, como medida preventiva para asegurar una mejor protección mecánica.
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La función del aceite en el motor del carro
El aceite es uno de los elementos más importantes en el funcionamiento del motor, no solo por su presencia constante, sino por el papel que desempeña en la protección y el control térmico de los componentes internos. Badillo indica que el aceite cumple básicamente dos funciones esenciales: la primera es proteger, y para esto debe lubricar; es decir, crear una película entre capa y capa de las piezas móviles del motor para evitar el contacto directo entre ellas y así reducir el desgaste prematuro.
La lubricación que ofrece el aceite no solo permite un funcionamiento más suave y eficiente del motor, sino que también previene daños severos en zonas de alta fricción como los pistones, el árbol de levas y las válvulas. De acuerdo con Badillo, esta función es crítica especialmente durante el arranque, ya que muchas piezas superiores del motor pueden encontrarse momentáneamente sin lubricación al encenderse el vehículo.
La segunda función del aceite, según precisa el asesor experto de Renault, es colaborar en la refrigeración del motor. Aunque en el encendido esta propiedad no se percibe de inmediato —ya que el sistema busca que el motor alcance su temperatura óptima de operación—, una vez en marcha, el aceite ayuda a disipar el calor generado por la combustión y la fricción mecánica. “Después de que el motor se calienta, el aceite contribuye a enfriar partes internas y a mantener una temperatura de trabajo estable”, explica Badillo.
¿Es mejor dejar el carro encendido o iniciar una marcha suave?
El debate sobre si es más conveniente dejar el vehículo encendido unos minutos antes de iniciar la marcha o simplemente arrancar de inmediato con una conducción suave ha sido común entre conductores. Badillo ofrece una visión técnica al respecto y explica que ambas prácticas pueden ser válidas dependiendo de las condiciones, pero recalca que lo ideal sigue siendo dar tiempo al motor para que lubrique sus componentes en un entorno de baja exigencia.
El experto sostiene que cuando el motor permanece encendido en ralentí, opera en un nivel mínimo de esfuerzo, lo que permite que el sistema de lubricación distribuya el aceite de manera uniforme antes de que las piezas entren en contacto bajo condiciones de carga. “Lo ideal es que en su mínimo esfuerzo, el motor se encargue de lubricar y mantener protegidas todas sus partes”, afirma.
Sin embargo, reconoce que en la práctica no siempre es posible dejar el carro calentando, ya sea por cuestiones de tiempo, ubicación o seguridad. En esos casos, Badillo recomienda iniciar la marcha con precaución. “Entiendo que no siempre se puede dejar calentar el carro, pero si no existen las condiciones, lo ideal es que al menos se arranque con revoluciones bajas”, concluye.
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