Además, modificó el tablero, la caja de velocidades, la columna de dirección y toda la consola central.
Esta empresa diseña piezas de fibra de carbono, por lo que no dudó en emplearla en el rediseño de panel frontal.
El precio asciende los 85,000 dólares. Según declaraciones del presidente de la empresa, Shawn Bayliff, el próximo modelo en el que están trabajando es un 911 coupé también con el asiento central y modificaciones para convertirlo en un verdadero “demonio de las pistas”.
Por El Espectador
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