Pocos automóviles roban tantas miradas en la vía como el primogénito eléctrico de BMW, el i3. Su look futurista, simpático, revolucionario y amigable lo han convertido en un icónico habitante de las carreteras del mundo.
Y es que, a pesar de tener más de seis años de vida, el i3 y su diseño que desafía paradigmas, no deja de estar de moda y de mostrar el inevitable destino —estético y mecánico— del universo del automóvil.
Es por esto, que la más reciente —y potente— versión del eléctrico de BMW, el i3s, no altera significativamente esa fórmula que hasta hoy tanto éxito le ha traído. Esa fórmula, que ha hecho a este innovador auto, un auténtico prócer y referente de la movilidad eléctrica.
El exterior del i3s, mantiene la silueta cúbica adornada con dos colores que lo ha hecho desde su nacimiento, indistinguible. Sin embargo, BMW, ha hecho a su diseño algunas sutiles, pero notables modificaciones que le inyectan al compacto germano una dosis de carácter y presencia. Puntualmente, cambios a la forma de las defensas, que dan un tono más desafiante, rines más grandes, y un “detrás” mas ancho, logran que el i3s exprese más contundencia y deportividad que la versión básica del modelo.
Sobre su habitáculo, no hay duda de que son pocas -por no decir ninguna- las cabinas que crean el ambiente futurista, espacioso, lógico, minimalista y estéril que se vive en el interior del i3s. Formas cautivantes, texturas intrigantes y materiales reciclados, componen este impecable y único ecosistema, que envuelve a los pasajeros de este fascinante compacto eléctrico alemán, en una experiencia como ninguna otra.
Esta, se ratifica en la vía, estando tras el volante de este raro espécimen del mundo automotriz. Y es que, manejar un vehículo cuyo corazón es una batería, supone una lógica y aproximación de manejo completamente distinta a esa que se tiene con los purasangres de gasolina.
Lo primero, es adaptarse al ruido del motor, —o más bien, a la ausencia de él—. Las notas y el rugir habitual y característico de los motores de combustión interna, es sustituido por un agudo y casi imperceptible sonido futurista, que hace del manejo del i3s una experiencia silenciosa y quizás para muchos, tranquilizadora.
Una de las sorpresas más grandes de manejar el i3s, es su potencia. Su simpática y amigable figura son solo una distracción de lo que hay por debajo de ella: un motor de 184 caballos de potencia y 270 n/m que pueden llevar a este compacto eléctrico de 0 a 100 km/h en 6.9 segundos. Una cifra que es superior a la de muchos de los vehículos que hoy ruedan por las calles del país.
La autonomía es a hoy, quizás el reto más grande que suponen los vehículos eléctricos en el mundo, y más en Colombia, donde la red de puntos de carga es reducida. El i3s, es capaz de recorrer 200 kilómetros con una sola carga y asumiendo condiciones óptimas. Es por esto, que para manejar un auto de estas características y maximizar su autonomía, se requiere un cambio de chip sobre cómo manejar.
Se necesita de un pie gentil y respetuoso con el pedal del acelerador. De una mente capaz de entender e interiorizar la lógica y principios básicos que permiten sacar el máximo provecho de la batería: gentil aceleración, velocidad constante y, anticiparse a las frenadas, pues en momentos de desaceleración, se crea energía que aumenta la autonomía del motor.
A propósito de esto, otro factor que hace único al i3s es que se puede manejar con un solo pedal. Esto pues, está equipado con un acelerador inteligente que cuando se suelta, es capaz de frenar delicadamente al vehículo, mientras que simultáneamente, regenera energía.
A pesar de ser un eléctrico, el i3s tiene inmerso en su ADN la impronta de BMW. Esa de crear experiencias de manejo únicas, emocionantes y memorables. Y es que la dirección de este carro es tan ágil, fiel y responsiva como la de cualquier otro auto del fabricante alemán.
En Colombia, cada vez son más los beneficios para los carros eléctricos. Actualmente, vale la pena destacar que estos autos no tienen pico y placa, y pagan un impuesto menor al de los vehículos a gasolina.
Por otra parte, la ausencia de piezas mecánicas comunes de los motores de combustión interna, y el sustituir la gasolina por electricidad, implica que los costos de tener un eléctrico sean considerablemente menores a los de un vehículo tradicional.
El i3s ofrece la que es quizás la mejor relación precio-calidad del segmento en Colombia, por lo que, a pesar de su precio ($170 millones) es probablemente, la mejor alternativa para quienes quieran adquirir un vehículo eléctrico.
En definitiva, el BMW i3s, es un carro que supera expectativas, pues tiene y da más de lo que se espera de él. Es silencioso, ecológico, capaz, cómodo y potente. Su esencia, carácter y personalidad emociona y cautiva, pero para terminar de enamorarse, es necesario manejarlo, vivirlo y sentirlo. Cuando esto ocurre, se logra tener en las manos, un pedazo del futuro, pues a pesar de sus seis años, el i3 no deja de ser el referente más fuerte en nuestro mercado del inevitable porvenir de la industria automotriz.