El SUV Volvo XC40 fue designado este lunes automóvil europeo del año 2018, algo inédito en la historia de la marca sueca que llega en la víspera de la apertura a la prensa de la 88 edición del Salón del Automóvil de Ginebra.
Hakan Samuelsson, director general de Volvo Cars, destacó que es la primera vez en que la marca "premium" sueca, propiedad del constructor chino Geely desde 2010, logra este premio, concedido cada año desde 1964.
El Volvo XC40 sucede al Peugeot 3008, que el año pasado se convirtió en el primer SUV (Sport Utility Vehicle), o 4x4 urbano, en llevarse este premio, muy codiciado por los constructores.
El nuevo modelo de Volvo quedó por delante de referencias como: el Alfa Romeo Stelvio, el Audi A8, el BMW serie 5, el Citroën C3 Aircross, el Kia Stinger y el Seat Ibiza.
Este nuevo triunfo de un SUV demuestra el dominio de este segmento, tanto en Europa como en el resto del mundo, representando ya un tercio de las ventas.
Volvo vendió el año pasado más de 570.000 automóviles, un nuevo récord para la marca y un alza de 7% respecto al año anterior. Sus ventas progresaron más de 25% en China, su principal mercado.
El XC 40 se basa en "una nueva plataforma codesarrollada con Geely", y estará dotado más adelante de motorizaciones "plug-in hybrides" y "completamente eléctricas", destacó Samuelsson.