La Fiscalía General de la Nación presentó ante un juez de control de garantías a Jhonmario de Jesús Chourio Salas, José Miguel Navas Amaro, Viviana Suárez Villanueva y Miguel Ángel Martínez Pinzón, presuntos integrantes de la red delincuencial y trasnacional, Tren de Aragua, quienes estarían involucrados en varios delitos en Bogotá y Chía (Cundinamarca).
La labor investigativa realizada de manera coordina con la Sijin de la Policía Metropolitana de Bogotá, les permitió establecer que estas personas serían las encargadas de promover actividades de narcomenudeo y el cobro de extorsiones, además de confrontar a otros grupos delincuenciales para mantener el control sobre estas rentas ilícitas.
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En ese sentido, el ente acusador señaló que Jhonmario de Jesús Chourio, de nacionalidad venezolana, sería uno de los cabecillas de la estructura y el encargado de definir los sectores en los que se debían vender los estupefacientes o exigir dinero a comerciantes, transportadores y trabajadores informales. Asimismo, estaría involucrado en varios homicidios como el ocurrido el pasado 7 de enero, en Duitama (Boyacá). Allí, un joven de 26 años, oriundo de Venezuela, fue atacado con arma de fuego en vía pública porque supuestamente estaba al servicio de otra organización ilegal.
“Ordenó cometer el homicidio contra Ronald Antonio Godoy Torres. Dicho homicidio ocurrió cuando la víctima fue interceptada por Jeison Blanco Castro y Ederson Blanco Castro, quienes sin mediar palabra accionaron su arma de fuego de manera indiscriminada, causándole la muerte inmediata a la víctima. Esto, bajo la modalidad de control territorial que su estructura quería desplegar a la Sabana Centro entre los municipios de Zipaquirá, Chía y Cajicá”, narró el fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales.
El rol de los otros señalados delincuentes
Durante la audiencia de legalización de captura, la Fiscalía detalló como Viviana Suárez Villanueva habría participado en el almacenamiento y entrega de sustancias ilícitas, así como en el manejo y administración de los recursos ilícitos.
Mientras tanto, José Miguel Navas Amaro y Miguel Ángel Martínez Pinzón, al parecer, realizaban vigilancias a las víctimas, obtenían y transportaban las armas de fuego utilizadas por el Tren de Aragua y coordinaban las zonas de microtráfico.
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En los panfletos que eran entregados a comerciantes, transportadores y trabajadores informales, la Fiscalía encontró que usaban letras recortadas de revista para enviar los mensajes amenazantes. Uno de estos fue entregado el 18 de octubre de 2024, a un establecimiento de comercio en Chía. “Mama guevos 24 horas para serrar el negosios y si abren de nuevo pura bomba ya save solo tren de aragua tiburon (sic)”. “Esto no es un juego vine el infierno y el diablo me los pidio 24 horas ya,saven siérran o bombas (sic)”.
De esta manera, el ente acusador les imputó los delitos de homicidio, concierto para delinquir agravado, extorsión y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. Los cuatro procesados no aceptaron los cargos formulados por la Fiscalía y deberán afrontar el proceso penal en centro carcelario.
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Por Redacción Bogotá
