Acción popular contra IDU por deprimido de la calle 94

Rolando González, edil de Chapinero, lidera la Acción popular y denunció, en diálogo con Caracol Radio, los retrasos de más de tres años en las obras de la calle 94 con NQS. Los vecinos de la zona aseguran que el Instituto Nacional de Desarrollo (IDU) debe responder por los daños tanto a su salud como a la movilidad.

“Muchas personas de las que vivimos aquí alrededor tienen problemas ya de salud por la cuestión del polvo y sobre todo problemas respiratorios. Eso nos está causando brotes en la piel también", dijo Cristina García, vecina de la obra.

Rolando González afirma que el IDU no les ha comunicado los cambios en el cronograma de la obra así como otras inconsistencias en el desarrollo de la obra. Afirma que por medio de correos electrónicos los contratistas demuestran que los retrasos son culpa del instituto.

"Los retrasos que se han venido presentando no han sido motivo de parte de las empresas públicas. Por el contrario, estas empresas en uno de estos debates le dejaron claro al IDU que todos los retrasos que se han venido presentando son por parte de ellos ", dijo González.

El director del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), William Camargo, asegura que el IDU está al tanto de los retrasos presentados en la obra. “Hay otros frentes de obra que se están trabajando y estamos revisando el tema de riesgos para dimensionar el impacto en el cronograma", dijo el funcionario a Caracol Radio.

Anterior a esta acción popular, la comunidad ya había interpuesto una acción de tutela pero el Juzgado 47 Civil consideró que no existía vulneración al derecho a la propiedad, al bienestar general y a la calidad de vida.

Después de haber caído en las manos del carrusel de la contratación, el paso deprimido en la calle 94 ha presentado varias inconsistencias incluido un sobrecosto de cuatro veces su valor inicial de 43 mil millones de pesos.
 

Rolando González, edil de Chapinero, lidera la Acción popular y denunció, en diálogo con Caracol Radio, los retrasos de más de tres años en las obras de la calle 94 con NQS. Los vecinos de la zona aseguran que el Instituto Nacional de Desarrollo (IDU) debe responder por los daños tanto a su salud como a la movilidad.

“Muchas personas de las que vivimos aquí alrededor tienen problemas ya de salud por la cuestión del polvo y sobre todo problemas respiratorios. Eso nos está causando brotes en la piel también", dijo Cristina García, vecina de la obra.

Rolando González afirma que el IDU no les ha comunicado los cambios en el cronograma de la obra así como otras inconsistencias en el desarrollo de la obra. Afirma que por medio de correos electrónicos los contratistas demuestran que los retrasos son culpa del instituto.

"Los retrasos que se han venido presentando no han sido motivo de parte de las empresas públicas. Por el contrario, estas empresas en uno de estos debates le dejaron claro al IDU que todos los retrasos que se han venido presentando son por parte de ellos ", dijo González.

El director del Instituto de Desarrollo Urbano (IDU), William Camargo, asegura que el IDU está al tanto de los retrasos presentados en la obra. “Hay otros frentes de obra que se están trabajando y estamos revisando el tema de riesgos para dimensionar el impacto en el cronograma", dijo el funcionario a Caracol Radio.

Anterior a esta acción popular, la comunidad ya había interpuesto una acción de tutela pero el Juzgado 47 Civil consideró que no existía vulneración al derecho a la propiedad, al bienestar general y a la calidad de vida.

Después de haber caído en las manos del carrusel de la contratación, el paso deprimido en la calle 94 ha presentado varias inconsistencias incluido un sobrecosto de cuatro veces su valor inicial de 43 mil millones de pesos.