Después de una reunión con el Comité Epidemiológico Nacional, el Distrito ha tomado nuevas medidas para enfrentar el tercer pico de la pandemia por el COVID-19. La alerta roja en toda la ciudad y la suspensión de las clases presenciales son algunas de las medidas decretadas por el Distrito.
De acuerdo con la alcaldesa Claudia López, toda la ciudad registra una alta afectación por el tercer pico, por lo que ya no solo el sistema hospitalario estará en alerta roja, sino toda la capital. “Entramos en el momento más crítico y difícil. Todos los modelos epidemiológicos nos indican que nos faltan dos semanas más para llegar al pico máximo. Solo nos quedan 140 UCI. Eso es todo lo adicional que podemos crecer. Llegaremos a 2.650 UCI máximo, de ahí en adelante no tenemos más capacidad de crecimiento”, dijo la alcaldesa de Bogotá, Claudia López
También el Distrito decidió suspender las clases presenciales en colegios y universidades públicas y privadas de toda la ciudad a partir de este lunes 26 de abril y hasta el próximo 7 de mayo. Asimismo, durante este lapso habrá ley seca en la ciudad, solo se permitirán las ventas a domicilio.
El toque de queda nocturno de 8:00 p.m. a 4:00 a.m. continuará, por eso desde ahora los establecimientos y comercios tendrán que cerrar a las 7:00 p.m. para que las personas puedan cumplir con la restricción de movilidad.
Finalmente la alcaldesa anunció que el modelo 4x3 (cuatro días funcionando y tres en confinamiento) seguirá en la ciudad y el pico y cédula también se mantendrá para entrar a comercios, entidades bancarias y notariales.
Las medidas se toman teniendo en cuenta el panorama en el sistema de salud de la ciudad, a lo que se sumará una presión adicional: la convocatoria del paro nacional, programada para este miércoles 28 de abril por sindicatos y estudiantes.
De acuerdo con el último reporte del Observatorio de Salud de Bogotá, la ciudad se encuentra con una ocupación en las UCI del 91 % para las camas destinadas para pacientes con COVID-19. Además, de acuerdo con la Secretaría de Salud, ya hay 41.000 casos activos en al capital.
Para evitar un colapso del sistema hospitalario la ciudad ha tomado medidas como las cuarentenas durante los fines de semana, el toque de queda nocturno y el pico y cédula. Además, este fin de semana la Alcaldía de Bogotá anunció tres nuevas medidas para ampliar la capacidad en los hospitales de la ciudad.
Como primera acción, el Distrito amplió los hospitales de campaña en Bogotá, con el fin de descongestionar los servicios de urgencias. Estos hospitales están ubicados en los hospitales Simón Bolívar, Engativá, Suba y Tunal, así como se habilitó 13 Unidades Habitacionales en los hospitales de San José, Centro Policlínico del Olaya, San Rafael, Hospital Universitario Nacional, Virrey Solís, Tunal y Kennedy, en los que se atienden patologías diferentes al COVID-19.
Por otro lado, se implementaron más instrumentos de apoyo en respiración para pacientes en urgencias. Finalmente, como última medida, se implemento el servicio de “Tele UCI”. Se trata de un nuevo centro en donde médicos especialistas monitorearán y asistirán a médicos y pacientes de los hospitales de la Subred Sur Occidente.
Para este nuevo servicio se invirtieron $335 millones. Se requirió de la creación de centrales de monitoreo locales para cada UCI y la estandarización de los sistemas de monitoreo de los pacientes.