Área Limpia: cambió de facturación, para cobrar a más usuarios en Suba

La decisión no tiene reversa. Las razones y las cuentas están claras. Área Limpia, el operador de aseo que recoge la basura en Suba, dejará sí o sí de cobrar su servicio a través de la factura del agua y lo hará en la de energía desde finales de este mes. Pese a que primero intentó terminar de mutuo acuerdo el contrato con el Acueducto (EAB), vigente hasta 2021, tras la negativa dice que lo terminará unilateralmente, por incumplimiento. No obstante, señala la empresa distrital, tendrá que demostrarlo.

El pleito, que llegará a los tribunales, va más allá de la simple opción de cobrar $956 más por el servicio de facturación a cada usuario y acceder mensualmente a los recursos de la tarifa de aseo (hoy recaudan cada dos meses con la EAB). Según sus directivos, hay un mayor beneficio: con la empresa de energía tienen opción de cobrarles a 40.000 usuarios nuevos que nunca han pagado por el servicio. Con esto, dicen, mejorarán su flujo de caja y el servicio e incluso asumirán los costos adicionales que el cambio pueda implicar para los estratos bajos.

La carta de terminación del convenio la radicaron la semana pasada y en ella, Guillermo Cerezo, representante legal de Área Limpia, le informó a la gerente del Acueducto que la decisión se fundaba en el supuesto incumplimiento de las obligaciones contractuales por parte de la empresa, así como en la urgente necesidad de dar continuidad a la prestación del servicio y en la facultad de elegir libremente el prestador del servicio de facturación.

En el documento, además de decir que los operadores se vieron obligados a firmar el contrato con el Acueducto y a aceptar sus términos, relacionan las supuestas fallas de la relación contractual. Según Cerezo, la EAB no entregó oportunamente la información de usuarios inconformes, no hacía los giros del dinero en los tiempos acordados y no tenía actualizado el censo de usuarios. Esto, sumado a que Condensa les ofreció más garantías, los llevó a tomar la decisión.

No obstante, más allá de las inconformidades, las razones económicas también pesan. Al menos así lo explicó Darío Beltrán, accionistas de Área Limpia, al decir que para su compañía hay dos aspectos claves: la calidad de la información y el flujo de caja: “Si bien la concesión es a varios años, este negocio es duro. Por eso la caja es importante, y si el flujo no es oportuno, se pone en riesgo el servicio”.

Las cuentas

Como ya lo había informado este diario, el mero cambio les permite cobrarles a los usuarios un poco más por la facturación. Mientras con el Acueducto la tarifa máxima es de $1.928 por cada usuario cada dos meses, con la empresa de energía podrán cobrar máximo $2.884, es decir, $956 más.

Para entender la dimensión de este cambio se puede tomar el ejemplo de un usuario estrato 4, que es el único que no tiene subsidios ni sobrecargos. Actualmente, cuando el cobro de aseo le llega con la factura del agua, paga cada dos meses $1.928, es decir, $11.568 al año. Ahora, con la factura de la luz pagará máximo $2.884 mensuales, es decir, $34.608. Prácticamente se le triplicará el cobro por este concepto.

No obstante, de esa tarifa por facturación, mientras a la empresa de Acueducto le pagaban por expedir y recaudar las facturas $703 cada dos meses por usuario, a la de energía le pagarán $1.085 mensuales. Es decir, de pagar al año $4.218 de facturación por cada usuario, pasará a pagar $13.020. ¿Dónde está el negocio?

“El costo de facturación es lo que hay que aplicarle al usuario y él no tiene la culpa de que elijamos a otro recaudador. Pero con esas cuentas no vamos a recibir más dinero por esa tarifa, pues la diferencia se quedará en manos de la empresa de energía. ¿Qué ganamos? Un censo de usuarios más amplio y actualizado. Por ejemplo, podremos cobrarles a usuarios que el Acueducto no factura, como en Guaymaral”, agregó Beltrán.

Esto fue determinante para la decisión de cambiar la empresa de facturación. Según los directivos de Área Limpia, mientras la EAB les factura en Suba a 335.000 usuarios, Codensa les factura a 375.000, es decir, 40.000 usuarios más. Además, al hacer una lectura de medidores de energía cada mes, tienen más opción de identificar los cambios de usos en algunas residencias, con lo que se pueden identificar, por ejemplo, más predios comerciales, que son los que pagan más por aseo.

Si los 40.000 nuevos usuarios pagaran la tarifa plena de aseo, sin subsidios ni sobrecargos, que quedaría en $19.000, esto se convertiría en una expecttativa de recaudo cercana a los $700 millones adicionales a lo que recibe actualmente. Y si a esto se suma la diferencia que podría quedarle por el cobro adicional mensual por la tarifa de facturación, el cambio se vuelve mpas rentable para Área Limpia.

Y hay un ingrediente adicional: la efectividad del recaudo. Además de cambiarlo de bimensual a mensual, los directivos de Área Limpia dicen que la empresa de energía es más efectiva que el Acueducto. Mientras la eficiencia de recaudo de ésta es de 94 %, la de energía tiene el 98 %. Teniendo en cuenta los censos de cada empresa, eso quiere decir que, mientras con la empresa distrital recaudan el pago de 314.000 suscriptores cada dos meses, con la de energía sería de 367.000 mensual.

“Esto realmente es lo que va a representar para nosotros más ingresos. Primero, porque vamos a facturarles a más usuarios. Segundo, el recaudo de la energía es más grande. Tercero, hoy en día estamos rezagados en la facturación. Esto sin contar que el Acueducto lee el medidor una vez cada dos meses y la energía lo hace cada mes. Eso nos permite tener mayor control del censo y el uso del predio, ya que se cobra una tarifa diferente dependiendo de eso”, resalta Beltrán.

“Hemos innovado, tenemos tecnología, buscamos cambiar y tener mejores servicios. Eso nos ha costado, y facturar con energía nos permite mejorar, sin tocar la tarifa. Algo que sí tenemos claro es que la diferencia del costo en la tarifa de comercialización para los estratos 1, 2 y 3 los asumirá la empresa. A los otros estratos, este cambio aumentará máximo $1.600”, expresó Cerezo, representante legal de Área Limpia.

Y concluyó: “Les apostamos a más usuarios, calidad en la lectura, más puntos de recaudo, información en tiempo real. Por la tarifa de comercialización no vamos a recibir más dinero. Luego del análisis encontramos que es más eficiente con Codensa”.

Ante esta situación, Lady Johana Ospina, gerente del Acueducto, indicó que en la empresa están tranquilos, porque han cumplido lo que se pactó en el contrato. Además, pese a que Área Limpia diga que terminó el contrato de forma unilateral, eso no se puede hacer: “Esto es un contrato que se rige por el derecho privado. Lo que recibimos fue un oficio respondiendo a nuestro rechazo de terminación de mutuo acuerdo, nada más”.

Y agregó: “Responderemos a su oficio pidiendo las pruebas. Lo que vemos es una apreciación por unos niveles de servicio que quedaron pactados, pero no un incumplimiento. Después de esto adelantaremos las acciones judiciales que correspondan”. Ospina advirtió que seguramente el operador no le reportará este mes al Acueducto la información para facturar. Sin embargo, esto no quiere decir que el próximo mes se presenten casos de personas a las que les llegue el cobro de aseo en la factura del agua y en la de la luz.

“Lo que sí hay que advertir, y esperamos que ellos se lo digan a sus usuarios, es que ambas empresas tienen ciclos de facturación diferentes: nosotros lo hacemos cada dos meses y la empresa de energía mensualmente. Puede que este mes lleguen ambos cobros, de meses diferentes, por lo que no se podrá entender cómo hay doble facturación, sino que coincidirán los tiempos de reparto”, concluyó.

La decisión no tiene reversa. Las razones y las cuentas están claras. Área Limpia, el operador de aseo que recoge la basura en Suba, dejará sí o sí de cobrar su servicio a través de la factura del agua y lo hará en la de energía desde finales de este mes. Pese a que primero intentó terminar de mutuo acuerdo el contrato con el Acueducto (EAB), vigente hasta 2021, tras la negativa dice que lo terminará unilateralmente, por incumplimiento. No obstante, señala la empresa distrital, tendrá que demostrarlo.

El pleito, que llegará a los tribunales, va más allá de la simple opción de cobrar $956 más por el servicio de facturación a cada usuario y acceder mensualmente a los recursos de la tarifa de aseo (hoy recaudan cada dos meses con la EAB). Según sus directivos, hay un mayor beneficio: con la empresa de energía tienen opción de cobrarles a 40.000 usuarios nuevos que nunca han pagado por el servicio. Con esto, dicen, mejorarán su flujo de caja y el servicio e incluso asumirán los costos adicionales que el cambio pueda implicar para los estratos bajos.

La carta de terminación del convenio la radicaron la semana pasada y en ella, Guillermo Cerezo, representante legal de Área Limpia, le informó a la gerente del Acueducto que la decisión se fundaba en el supuesto incumplimiento de las obligaciones contractuales por parte de la empresa, así como en la urgente necesidad de dar continuidad a la prestación del servicio y en la facultad de elegir libremente el prestador del servicio de facturación.

En el documento, además de decir que los operadores se vieron obligados a firmar el contrato con el Acueducto y a aceptar sus términos, relacionan las supuestas fallas de la relación contractual. Según Cerezo, la EAB no entregó oportunamente la información de usuarios inconformes, no hacía los giros del dinero en los tiempos acordados y no tenía actualizado el censo de usuarios. Esto, sumado a que Condensa les ofreció más garantías, los llevó a tomar la decisión.

No obstante, más allá de las inconformidades, las razones económicas también pesan. Al menos así lo explicó Darío Beltrán, accionistas de Área Limpia, al decir que para su compañía hay dos aspectos claves: la calidad de la información y el flujo de caja: “Si bien la concesión es a varios años, este negocio es duro. Por eso la caja es importante, y si el flujo no es oportuno, se pone en riesgo el servicio”.

Las cuentas

Como ya lo había informado este diario, el mero cambio les permite cobrarles a los usuarios un poco más por la facturación. Mientras con el Acueducto la tarifa máxima es de $1.928 por cada usuario cada dos meses, con la empresa de energía podrán cobrar máximo $2.884, es decir, $956 más.

Para entender la dimensión de este cambio se puede tomar el ejemplo de un usuario estrato 4, que es el único que no tiene subsidios ni sobrecargos. Actualmente, cuando el cobro de aseo le llega con la factura del agua, paga cada dos meses $1.928, es decir, $11.568 al año. Ahora, con la factura de la luz pagará máximo $2.884 mensuales, es decir, $34.608. Prácticamente se le triplicará el cobro por este concepto.

No obstante, de esa tarifa por facturación, mientras a la empresa de Acueducto le pagaban por expedir y recaudar las facturas $703 cada dos meses por usuario, a la de energía le pagarán $1.085 mensuales. Es decir, de pagar al año $4.218 de facturación por cada usuario, pasará a pagar $13.020. ¿Dónde está el negocio?

“El costo de facturación es lo que hay que aplicarle al usuario y él no tiene la culpa de que elijamos a otro recaudador. Pero con esas cuentas no vamos a recibir más dinero por esa tarifa, pues la diferencia se quedará en manos de la empresa de energía. ¿Qué ganamos? Un censo de usuarios más amplio y actualizado. Por ejemplo, podremos cobrarles a usuarios que el Acueducto no factura, como en Guaymaral”, agregó Beltrán.

Esto fue determinante para la decisión de cambiar la empresa de facturación. Según los directivos de Área Limpia, mientras la EAB les factura en Suba a 335.000 usuarios, Codensa les factura a 375.000, es decir, 40.000 usuarios más. Además, al hacer una lectura de medidores de energía cada mes, tienen más opción de identificar los cambios de usos en algunas residencias, con lo que se pueden identificar, por ejemplo, más predios comerciales, que son los que pagan más por aseo.

Si los 40.000 nuevos usuarios pagaran la tarifa plena de aseo, sin subsidios ni sobrecargos, que quedaría en $19.000, esto se convertiría en una expecttativa de recaudo cercana a los $700 millones adicionales a lo que recibe actualmente. Y si a esto se suma la diferencia que podría quedarle por el cobro adicional mensual por la tarifa de facturación, el cambio se vuelve mpas rentable para Área Limpia.

Y hay un ingrediente adicional: la efectividad del recaudo. Además de cambiarlo de bimensual a mensual, los directivos de Área Limpia dicen que la empresa de energía es más efectiva que el Acueducto. Mientras la eficiencia de recaudo de ésta es de 94 %, la de energía tiene el 98 %. Teniendo en cuenta los censos de cada empresa, eso quiere decir que, mientras con la empresa distrital recaudan el pago de 314.000 suscriptores cada dos meses, con la de energía sería de 367.000 mensual.

“Esto realmente es lo que va a representar para nosotros más ingresos. Primero, porque vamos a facturarles a más usuarios. Segundo, el recaudo de la energía es más grande. Tercero, hoy en día estamos rezagados en la facturación. Esto sin contar que el Acueducto lee el medidor una vez cada dos meses y la energía lo hace cada mes. Eso nos permite tener mayor control del censo y el uso del predio, ya que se cobra una tarifa diferente dependiendo de eso”, resalta Beltrán.

“Hemos innovado, tenemos tecnología, buscamos cambiar y tener mejores servicios. Eso nos ha costado, y facturar con energía nos permite mejorar, sin tocar la tarifa. Algo que sí tenemos claro es que la diferencia del costo en la tarifa de comercialización para los estratos 1, 2 y 3 los asumirá la empresa. A los otros estratos, este cambio aumentará máximo $1.600”, expresó Cerezo, representante legal de Área Limpia.

Y concluyó: “Les apostamos a más usuarios, calidad en la lectura, más puntos de recaudo, información en tiempo real. Por la tarifa de comercialización no vamos a recibir más dinero. Luego del análisis encontramos que es más eficiente con Codensa”.

Ante esta situación, Lady Johana Ospina, gerente del Acueducto, indicó que en la empresa están tranquilos, porque han cumplido lo que se pactó en el contrato. Además, pese a que Área Limpia diga que terminó el contrato de forma unilateral, eso no se puede hacer: “Esto es un contrato que se rige por el derecho privado. Lo que recibimos fue un oficio respondiendo a nuestro rechazo de terminación de mutuo acuerdo, nada más”.

Y agregó: “Responderemos a su oficio pidiendo las pruebas. Lo que vemos es una apreciación por unos niveles de servicio que quedaron pactados, pero no un incumplimiento. Después de esto adelantaremos las acciones judiciales que correspondan”. Ospina advirtió que seguramente el operador no le reportará este mes al Acueducto la información para facturar. Sin embargo, esto no quiere decir que el próximo mes se presenten casos de personas a las que les llegue el cobro de aseo en la factura del agua y en la de la luz.

“Lo que sí hay que advertir, y esperamos que ellos se lo digan a sus usuarios, es que ambas empresas tienen ciclos de facturación diferentes: nosotros lo hacemos cada dos meses y la empresa de energía mensualmente. Puede que este mes lleguen ambos cobros, de meses diferentes, por lo que no se podrá entender cómo hay doble facturación, sino que coincidirán los tiempos de reparto”, concluyó.