
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La Secretaría de Salud anunció avances importantes en los servicios médicos pensados para personas privadas de la libertad, retenidas y adolescentes vinculados al Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes (SRPA).
Le puede interesar: Director de la cárcel El Buen Pastor debe garantizar acceso a salud para reclusas
Entre los avances más significativos del Modelo de Atención en Salud MAS Bienestar, resalta la cobertura del 97% de afiliación para personas privadas de la libertad en Unidades de Reacción Inmediata (URI), estaciones de Policía y en la cárcel Distrital. “Esta cobertura beneficia a más de 3.400 personas retenidas en URI y estaciones de policía, y a 1.020 personas en la Cárcel Distrital de Varones y su Anexo de Mujeres (CDVAM)”, asegura la Secretaría de Salud.
“Estamos construyendo un modelo de salud con enfoque social, que reconoce la dignidad y las necesidades de todas las personas, incluyendo aquellas en condición de privación de la libertad. La salud debe ser un derecho garantizado sin distinción”, afirmó Luis Alexander Moscoso, subsecretario de Servicios de Salud y Aseguramiento.
“El reto no es solo afiliar, sino también brindar atención efectiva y de calidad. Por eso trabajamos articuladamente con las subredes, el ICBF y las EAPB para que el acceso a los servicios de salud sea real y con enfoque diferencial”, añade el subsecretario.
En ese sentido, en cuanto al Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes, se suscribió un convenio interadministrativo entre el ICBF y la Subred Sur, con el propósito fundamental de garantizar la atención intramural con énfasis en la salud mental para adolescentes y jóvenes que permanecen en el Cento de Atención Especializada (CAE) El Redentor. Persiguiendo ese objetivo, el pasado 22 de julio entró en operación la Unidad Extramural Candelaria La Nueva Hogar Masculino, en el interior del CAE, la cual cuenta con la dotación médica necesaria para birndar una atención integral a los adolescentes allí recluidos.
Así las cosas, se estima que alrededor de 242 adolescentes podrán recibir atención oportuna en servicios de salud como enfermería, medicina general, odontología, psicología, nutrición, entre otros.
Adicionalmente, para los 763 niños, niñas, adolescentes y jóvenes en condición no privativa, los Equipos Básicos de Salud Extramural en articulación con ICBF y la Secretaría de Integración Social han realizado procesos de caracterización, elaboración de planes individuales en salud y atención integral en campo.
La estrategia busca robustecer la deteriorada atención médica para la población privada de la libertad, para lograr sumar en el enfoque restaurativo de resocialización que se busca, para el cual, una atención digna en salud es el primer paso.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
