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El alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, junto con la secretaria Distrital de Ambiente, Susana Muhamad, presentaron oficialmente este miércoles el Plan Distrital de Adaptación y Mitigación a la Variabilidad Climática, en el marco del Encuentro de las Américas frente al Cambio Climático que llegó a su último día
Durante el encuentro, el Distrito propuso como primera medida continuar incentivando el uso de la bicicleta. Complementando dicho ítem, y como acciones que contempla el Plan del Distrito en materia de movilidad, se propuso electrificar los taxis de la ciudad, dar el salto tecnológico en el transporte público, construir el metro pesado y cuatro livianos.
En el encuentro también se precisaron algunos posibles efectos del cambio climático, puesto que con el aumento de precipitaciones, el Distrito calcula inundaciones más frecuentes e intensas en las localidades de Kennedy, Bosa, Rafael Uribe, Engativá y Suba; asimismo, deslizamientos de tierra en Tunjuelito, Rafael Uribe, Usme y Ciudad Bolívar.
Además de las proyecciones, el Plan Distrital plantea como otras probables consecuencias de la variación climática, temporadas de sequía, escasez de agua y desabastecimiento de alimentos en la capital del país. También se podría generar una drástica reducción del 70.5% de bosques y 40 % en páramos y, finalmente, los suelos en Cundinamarca de los que se abastece Bogotá de alimentos, podrían sufrir una reducción de disponibilidad de agua hasta del 60%.
Por este motivo, la Administración Distrital diseñó el proyecto con el que buscan mitigar los efectos del calentamiento global en Bogotá, impulsándola en inicio como una ciudad baja en carbono. Además, se espera reducir emisiones, mejorando la eficiencia energética, aprovechando los residuos sólidos y construyendo edificaciones sostenibles.
El segundo punto del plan, es ‘‘reducir la vulnerabilidad ante eventos de variabilidad climática: Programa de Ordenamiento Territorial y Ecourbanismo para la mitigación y la adaptación, Programa de Cambio climático y salud, Recuperación de la Estructura Ecológica y Programa de Seguridad alimentaria’’.
Llevar a cabo un plan integral para garantizar el agua, se configura como el tercer aspecto del proyecto, con el que puntualmente el Distrito busca reducir la huella hídrica de la ciudad en un 30% para 2038 y hasta un 40% en el año 2050.
Finalmente, el Plan pretende consolidar un sistema de gobernanza ambiental y promover el cambio cultural para afrontar colectivamente los fenómenos que deterioran el entorno natural.
‘‘El compromiso de gobiernos, organizaciones sociales y ciudadanos es indispensable para definir y aplicar políticas climáticas mundiales más contundentes de las que se han formulado hasta la actualidad’’, indicó la Alcaldía de Bogotá, que además extendió una invitación a crear una dinámica social propia, que se articule a una red global de ciudades y movimientos sociales. Esto, para evaluar y articular experiencias de adaptación y mitigación, con las que se pretende generar un cambio de paradigmas, en beneficio del agua, la tierra y la vida.