Colegio Médico de Bogotá pide que se declare la alerta roja hospitalaria

Continúa la polémica por el anuncio que hizo el alcalde encargado de Bogotá, Luis Ernesto Gómez, de poner en cuarentena estricta a las localidades de Suba, Engativá y Usaquén, debido al alto porcentaje de ocupación que registran las camas UCI para pacientes COVID-19, las cuales alcanzaron este lunes el 77,7 %.

Uno de los primeros en levantarse contra esta medida fue Fenalco Bogotá Cundinamarca, federación que la calificó como “nefasta” e ineficiente para atender la emergencia, pues no solo pone en riesgo la estabilidad financiera de un considerable grupo de comercios, sino que no surtirá efecto debido a la informalidad que generaría. En suma, creen que más personas saldrán a la calle a buscar su sustento, y con ellos, el aumento en los contagios.

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Otra mirada es la que recientemente comunicó el Colegio Médico de Bogotá, el cual considera que poner en cuarentena a estas tres localidades “no es suficiente si no se educa a la población y no se atienden sus condiciones sociales que los llevan a no seguir las recomendaciones en salud pública”.

Del mismo modo, el colegio considera urgente que en Bogotá se declare la alerta roja hospitalaria, la cual se alcanza cuando la ocupación de las UCI es superada en un 75 %. Como se dijo antes, Bogotá ya consolida un 77,7 %, sin embargo, en ocasiones atrás, la alerta no se emite hasta que pasan unos días en esos niveles, ya que estos pueden variar. De hecho, la alcaldesa Claudia López dijo finalizando el año que se esperaba una reducción de las cifras conforme avanzaba enero y pasaba el coletazo de las celebraciones de fin de año.

Pero ¿Qué significa la declaración de una alerta roja hospitalaria? según la Secretaría Distrital de Salud, esta conduce a la presencia de personal administrativo y asistencial en los distintos niveles y servicios, a la activación de los mecanismos que garanticen el suministro de elementos, suministros y equipos para la atención de pacientes, además se suspende todas las actividades electivas.

También pide que se declare una emergencia sanitaria. según un artículo de la Universidad Nacional, es una condición que le permite al presidente de la República legislar sin la ayuda del Congreso, como decretos relacionados a servicios públicos, contratos laborales, derecho a la salud y demás relacionados a la pandemia.

Según el colegio, las cifras que entrega la Secretaría Distrital de Salud sobre la ocupación de camas UCI no corresponden con la realidad en los hospitales y las clínicas. “De 60 instituciones de salud habilitadas con camas UCI, 23 ya tienen ocupación del 100 % y el restante está del 70 % al 100 %.

La situación que plantea el colegio es preocupante, pues, echando mano de cifras manejadas por la Asociación de Medicina de Urgencias y Emergencias (ACEM), el 30 % del personal de la salud en Bogotá no está disponible, debido a que algunos han fallecido, mientras que otros están incapacitados o aislados por la pandemia, además de los que han renunciado a sus contratos por la falta de garantías de bioseguridad y demás faltas de condiciones laborales dignas.

Finalmente, el colegio le pide al Distrito que defina una estrategia clara que recupere y fortalezca la rectoría de la salud pública, pues el aislamiento y la cuarentena, asegura, no resuelve completamente la situación.

Continúa la polémica por el anuncio que hizo el alcalde encargado de Bogotá, Luis Ernesto Gómez, de poner en cuarentena estricta a las localidades de Suba, Engativá y Usaquén, debido al alto porcentaje de ocupación que registran las camas UCI para pacientes COVID-19, las cuales alcanzaron este lunes el 77,7 %.

Uno de los primeros en levantarse contra esta medida fue Fenalco Bogotá Cundinamarca, federación que la calificó como “nefasta” e ineficiente para atender la emergencia, pues no solo pone en riesgo la estabilidad financiera de un considerable grupo de comercios, sino que no surtirá efecto debido a la informalidad que generaría. En suma, creen que más personas saldrán a la calle a buscar su sustento, y con ellos, el aumento en los contagios.

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Otra mirada es la que recientemente comunicó el Colegio Médico de Bogotá, el cual considera que poner en cuarentena a estas tres localidades “no es suficiente si no se educa a la población y no se atienden sus condiciones sociales que los llevan a no seguir las recomendaciones en salud pública”.

Del mismo modo, el colegio considera urgente que en Bogotá se declare la alerta roja hospitalaria, la cual se alcanza cuando la ocupación de las UCI es superada en un 75 %. Como se dijo antes, Bogotá ya consolida un 77,7 %, sin embargo, en ocasiones atrás, la alerta no se emite hasta que pasan unos días en esos niveles, ya que estos pueden variar. De hecho, la alcaldesa Claudia López dijo finalizando el año que se esperaba una reducción de las cifras conforme avanzaba enero y pasaba el coletazo de las celebraciones de fin de año.

Pero ¿Qué significa la declaración de una alerta roja hospitalaria? según la Secretaría Distrital de Salud, esta conduce a la presencia de personal administrativo y asistencial en los distintos niveles y servicios, a la activación de los mecanismos que garanticen el suministro de elementos, suministros y equipos para la atención de pacientes, además se suspende todas las actividades electivas.

También pide que se declare una emergencia sanitaria. según un artículo de la Universidad Nacional, es una condición que le permite al presidente de la República legislar sin la ayuda del Congreso, como decretos relacionados a servicios públicos, contratos laborales, derecho a la salud y demás relacionados a la pandemia.

Según el colegio, las cifras que entrega la Secretaría Distrital de Salud sobre la ocupación de camas UCI no corresponden con la realidad en los hospitales y las clínicas. “De 60 instituciones de salud habilitadas con camas UCI, 23 ya tienen ocupación del 100 % y el restante está del 70 % al 100 %.

La situación que plantea el colegio es preocupante, pues, echando mano de cifras manejadas por la Asociación de Medicina de Urgencias y Emergencias (ACEM), el 30 % del personal de la salud en Bogotá no está disponible, debido a que algunos han fallecido, mientras que otros están incapacitados o aislados por la pandemia, además de los que han renunciado a sus contratos por la falta de garantías de bioseguridad y demás faltas de condiciones laborales dignas.

Finalmente, el colegio le pide al Distrito que defina una estrategia clara que recupere y fortalezca la rectoría de la salud pública, pues el aislamiento y la cuarentena, asegura, no resuelve completamente la situación.