Tres meses después del rebose de las aguas negras y el desbordamiento del Canal Cundinamarca, que inundaron las localidades de Bosa y Kennedy, más de 13.000 familias que resultaron damnificadas aún no han recibido la ayuda humanitaria de $1’500.000 prometida por el Gobierno.
Javier Pava, director del Fondo de Prevención y Atención de Emergencias (Fopae) del Distrito, aseguró que la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo todavía no tiene asignados los recursos adicionales para cubrir las ayudas.
Juan Carlos López, Carlos Alberto Vásquez y Benicio Buitrago, voceros de los damnificados, se reunieron ayer con Pava en El Espectador y le manifestaron sus inquietudes respecto a la tardanza en la entrega de ayudas humanitarias, que desencadenó una protesta de los ciudadanos el jueves pasado en la Avenida Ciudad de Cali.
En la charla, el director del Fopae manifestó que, según la entidad nacional, se están tramitando las solicitudes pertinentes para obtener los recursos por medio del Fondo Nacional de Calamidades.
Pero la tardanza en la entrega del $1’500.000 a cada una de las familias afectadas por las inundaciones, se relaciona con los errores que se presentaron al realizar el censo de población afectada en 2011.
Mientras que la administración anterior reveló un total de 16.574 familias afectadas, el pasado 10 de febrero la Secretaría de Integración Social indicó que en realidad la cifra corresponde a 27.196 núcleos familiares.
Los datos más recientes del censo surgieron luego de que la actual administración distrital encontró inconsistencias en la sistematización del conteo anterior.
Además, en el nuevo proceso se incluyeron habitantes del barrio El Recuerdo de Santa Fe, que también habían sufrido daños a causa de las inundaciones y no figuraban en la lista de damnificados.
Juan Carlos López, uno de los representantes del barrio El Recuerdo de Santa Fe, aseguró que varios miembros de su comunidad recibieron ayudas de algunas empresas de telefonía, como “Telefónica, que nos regaló un mes de servicio”. Pero aún los vecinos tienen inquietudes respecto al descuento en el pago de las facturas del Acueducto y la exención en el pago del impuesto predial.
Por lo pronto, quienes no habían sido incluidos en el censo anterior, todavía no tienen claro si recibirán la ayuda humanitaria.
Al respecto, Pava explicó que ya hizo la petición para que aquellas familias incluidas posteriormente en el registro de damnificados, también reciban los beneficios.
Carlos Alberto Vásquez, residente del conjunto Alameda del Río, en el barrio El Recreo de Bosa, agregó que no está de acuerdo con recurrir a protestas como las ocurridas el jueves. Sin embargo, reclamó que el Fopae continúe con las solicitudes al Gobierno, de manera que puedan tener una respuesta respecto al apoyo económico.
El director del Fopae también aclaró a los líderes de Bosa que la Secretaría de Integración Social ha entregado a las familias damnificadas 17.693 bonos canjeables por alimentos y les aseguró que los restantes se entregarán en el mes de abril.
Los residentes de la localidad, por su parte, esperan que los jarillones reforzados a lo largo del río Bogotá y las válvulas antirreflujo, que han sido instaladas por el Acueducto, sean medidas efectivas para evitar que en el futuro se presenten nuevas emergencias, como la que vivieron en diciembre de 2011.
Por Redacción Bogotá
