“El proyecto de la nueva sede empezó de ceros”: directora de la Orquesta Filarmónica de Bogotá
Sandra Meluk, al mando de la OFB desde febrero de este año, dice que descartaron por completo el diseño elaborado por la administración pasada. Ahora se encuentran estructurando un nuevo plan de construcción.
Redacción Bogotá
En mayo pasado, el Distrito descartó el plan que la administración pasada elaboró para construir la primera sede de la Orquesta Filarmónica de Bogotá (OFB). El diseño, realizado por la Universidad Nacional —en un convenio con la Secretaría de Cultura y la Empresa de Acueducto— fue relegado por sus altos costos ($110.000 millones). Desde ese momento, la Alcaldía comenzó a estructurar un nuevo plan de construcción. A la fecha, se encuentra en una fase inicial: están haciendo estudios de los requerimientos técnicos del proyecto.
“Queremos hacer una obra sostenible en el tiempo. En ese sentido, estamos buscando el lugar adecuado y precisando la información técnica. Algo que no había en los primeros diseños”, dice Sandra Meluk, directora de la OFB. Agrega que la sede debe contar con una sala de conciertos, salones de ensayos colectivos e individuales, auditorios para actividades académicas, bodega para instrumentos y una oficina para la administración.
Un lugar, en definitiva, adecuado para sus múltiples orquestas y más amplio que el auditorio León de Greiff, su casa durante 50 años de historia. Vale recordar que con el tiempo la agrupación ha crecido: la banda principal ahora está conformada por 98 integrantes; las orquestas juveniles, 300; la orquesta prejuvenil, 80, y el coro infantil, 80.
Para la directora, esta sede posibilitaría una coordinación conjunta de todos los grupos de la orquesta y un sonido que la identifique. El predio, según la funcionaria, deberá estar en una zona alejada del ruido, con parqueaderos cercanos y que sea un punto cultural de la ciudad. Para su consecución, el Distrito cuenta con $14.000 millones, y espera concretar en los próximos meses aliados privados que garanticen su construcción y dotación.
El concejal Antonio Sanguino (Partido Verde) señala que el anuncio del alcalde de la renovación del Coliseo El Campín es desafortunada, en el sentido que los estudios y diseños que realizó la Nacional contemplaban ese escenario para la construcción. David García, exdirector de la Filarmónica, declaró que no se debieron descartar esos estudios, pues “garantizaban las condiciones acústicas necesarias para su puesta en marcha”.
Lo cierto es que la anhelada sede para uno de los platos fuertes del pasado Festival de Verano, tras ensamblar una presentación con la banda bogotana Los Petit Fellas, sigue en veremos. Sus conciertos, entretanto, se multiplican en localidades como Bosa, Candelaria y Sumapaz.
En mayo pasado, el Distrito descartó el plan que la administración pasada elaboró para construir la primera sede de la Orquesta Filarmónica de Bogotá (OFB). El diseño, realizado por la Universidad Nacional —en un convenio con la Secretaría de Cultura y la Empresa de Acueducto— fue relegado por sus altos costos ($110.000 millones). Desde ese momento, la Alcaldía comenzó a estructurar un nuevo plan de construcción. A la fecha, se encuentra en una fase inicial: están haciendo estudios de los requerimientos técnicos del proyecto.
“Queremos hacer una obra sostenible en el tiempo. En ese sentido, estamos buscando el lugar adecuado y precisando la información técnica. Algo que no había en los primeros diseños”, dice Sandra Meluk, directora de la OFB. Agrega que la sede debe contar con una sala de conciertos, salones de ensayos colectivos e individuales, auditorios para actividades académicas, bodega para instrumentos y una oficina para la administración.
Un lugar, en definitiva, adecuado para sus múltiples orquestas y más amplio que el auditorio León de Greiff, su casa durante 50 años de historia. Vale recordar que con el tiempo la agrupación ha crecido: la banda principal ahora está conformada por 98 integrantes; las orquestas juveniles, 300; la orquesta prejuvenil, 80, y el coro infantil, 80.
Para la directora, esta sede posibilitaría una coordinación conjunta de todos los grupos de la orquesta y un sonido que la identifique. El predio, según la funcionaria, deberá estar en una zona alejada del ruido, con parqueaderos cercanos y que sea un punto cultural de la ciudad. Para su consecución, el Distrito cuenta con $14.000 millones, y espera concretar en los próximos meses aliados privados que garanticen su construcción y dotación.
El concejal Antonio Sanguino (Partido Verde) señala que el anuncio del alcalde de la renovación del Coliseo El Campín es desafortunada, en el sentido que los estudios y diseños que realizó la Nacional contemplaban ese escenario para la construcción. David García, exdirector de la Filarmónica, declaró que no se debieron descartar esos estudios, pues “garantizaban las condiciones acústicas necesarias para su puesta en marcha”.
Lo cierto es que la anhelada sede para uno de los platos fuertes del pasado Festival de Verano, tras ensamblar una presentación con la banda bogotana Los Petit Fellas, sigue en veremos. Sus conciertos, entretanto, se multiplican en localidades como Bosa, Candelaria y Sumapaz.