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Bogotá tiene pendiente la formulación del Plan de Ordenamiento Territorial (POT), un documento que define la forma en que la ciudad hará uso de su geografía. El POT es una hoja de ruta para definir aspectos como hacia dónde y cómo debe crecer Bogotá, en qué lugar se debe construir, en dónde pueden ir nuevas vías, cómo impactar positivamente el medio ambiente de la ciudad, entre otros. Este documento debía presentarse durante la anterior administración, pero el Concejo no aprobó el plan y la tarea le quedó a esta administración.
Por casi tres años, el Distrito surtió cinco etapas previas antes de presentar el documento ante la ciudad: seguimiento y evaluación; diagnóstico; formulación, más las dos primeras fases de participación ciudadana, fueron los pasos que precedieron el paso que se dio este martes. La Secretaría de Planeación anunció que está listo y publicado el proyecto de POT para su respectiva revisión ante las autoridades ambientales. La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) ya tienen el documento en sus manos, y ahora viene la concertación de los aspectos ambientales rurales por parte de la CAR, y de los temas ambientales urbanos por parte de la SDA.
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De forma paralela a la radicación del POT ante las autoridades ambientales se completará la fase de participación ciudadana mediante la etapa de concertación ante la ciudadanía. En este aspecto, el Distrito planea ir durante 100 días a cada una de las Unidades de Planeamiento Zonal (UPZ) y zonas rurales de la ciudad. En dichas visitas, la administración utilizará diferentes escenarios para presentarles a los residentes la propuesta de POT para su barrio y para toda Bogotá.
Una vez se concluyan las etapas de concertación ambiental y de concertación ante la ciudadanía, el Distrito presentará su POT ante el Consejo Territorial de Planeación Distrital (CTPD), que evaluará el documento durante 30 días y emitirá luego un concepto. Si bien los comentarios de este consejo no son vinculantes, son un paso fundamental para la consolidación de la propuesta definitiva que llegará al Concejo de Bogotá. La corporación, una vez reciba el proyecto, tendrá 90 días para debatirlo y aprobarlo o no.
De acuerdo con el Distrito, el POT que proponen se basa en la búsqueda de una buena calidad de vida para todos los capitalinos, entendida como la garantía de un medio ambiente sano, agua potable, vivienda digna, espacios públicos de calidad, recreación, áreas de trabajo, transporte público eficiente y el conjunto de edificaciones y equipamientos que se requieren para fomentar el desarrollo colectivo e individual para todos.
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“Esta primera revisión general del POT constituye para Bogotá una oportunidad de revaluar la forma en que hemos construido la ciudad y nuestros entornos rurales, así como para replantearnos la imagen y la visión de territorio que queremos heredar a nuestros hijos. La planificación y el ordenamiento equilibrado del territorio de Bogotá y la Sabana deben partir de la búsqueda de una sostenibilidad integral, donde se tengan en cuenta los objetivos ambientales, sociales y económicos, de tal manera que se garantice la calidad de vida de las presentes y futuras generaciones”, manifestó Andrés Ortiz Gómez, secretario de Planeación.
El POT cambiará la forma en que se concibe la ciudad y, si se aprueba tal como está la propuesta del Distrito, habrá modificaciones en temas como el espacio público, vías, transporte masivo, número de localidades, comercio en las grandes avenidas, integración con los municipios, altura de los nuevos edificios, así como los usos de los primeros y últimos pisos de las próximas construcciones.
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Por todo esto, el POT plantea el desarrollo de proyectos estratégicos (que se concentran en una zona, como los planes en Ciudad Norte, Ciudad Río, Lagos del Tunjuelo o Alameda Entreparques), y proyectos estructurales (que tienen incidencia en varios puntos de la ciudad, como el Metro, las troncales, los planes en los cerros).
Por Redacción Bogotá - Bogota@elespectador.com
