Estaba más que advertido. Si el Concejo no agilizaba la elección de un contralor interino, en reemplazo del inhabilitado y destituido Miguel Ángel Moralesrusssi, antes de terminar el período de sesiones ordinarias, la competencia de su nombramiento sería del alcalde Samuel Moreno.
El plazo se cumplió el sábado. tras varios intentos fallidos por parte de la presidenta del Concejo, María Victoria Vargas, para acelerar el trámite, a partir de este lunes el destino de la Contraloría Distrital, con más de 400 procesos de revisión fiscal en curso, está en manos de Moreno.
No han faltado quienes le han pedido al alcalde que se declare impedido para hacer la designación, dado que está en medio de una tormenta política por los mismos hechos que terminaron con la destitución de Moralesrussi: el carrusel de contratos de la administración distrital, en el que algunos funcionarios habrían aprovechado sus jerarquías para solicitar comisiones a los miembros del controvertido grupo empresarial Nule a cambio de adjudicaciones o tratos preferenciales en sus negocios.
Desde el 25 de febrero, cuando Moralesrussi fue destituido por el procurador Alejandro Ordóñez e inhabilitado para ejercer cargos públicos durante 20 años, el nombre de su futuro sucesor no era claro. Hoy la entidad cumple 17 días acéfala.
Primero, la tensión corrió por cuenta de la convocatoria de la presidencia del Concejo para nombrar provisionalmente, mientras los altos tribunales enviaban la terna de candidatos para proceder a la elección, al contralor auxiliar, Víctor Manuel Armella, pero las bancadas vetaron su nombre por ser la mano derecha de Moralesrussi. Ante la oleada de críticas y cuestionamientos. También fracasó la propuesta de promover para el cargo a otros funcionarios de la entidad.
Finalmente, en una votación efectuada en la plenaria del pasado sábado 17 cabildantes manifestaron que el Concejo sólo tenía facultades para elegir un contralor en propiedad, mientras un grupo de 13 votó diciendo que sí estaban habilitados para designar un contralor interino.
Ahora todo depende del alcalde y su elegido tendrá el control de la entidad hasta que los tribunales de Cundinamarca y Bogotá envíen sus candidatos para que el Concejo elija al funcionario que tomará la riendas de la entidad en propiedad durante lo que resta del período para el cual había sido elegido el funcionario destituido. Los magistrados ya hicieron saber que sus postulados serán definidos a comienzos de abril próximo.
Mientras tanto, el senador Iván Moreno, hermano del alcalde de Bogotá, sigue en turno en la Procuraduría para defenserse de las acusaciones en su contra dentro del escándalo del carrusel de la contratación.