A partir de este viernes 3 de julio, el Instituto para la Economía Social (IPES) iniciará el plan piloto denominado “Pico y Puesto”, con el propósito de organizar la actividad económica de los vendedores informales de San Victorino y disminuir las aglomeraciones para evitar riesgos de contagio por COVID-19.
Para ello, el IPES entregó credenciales a 224 vendedores informales, de los cuales 112 tienen permiso para trabajar este viernes,día que se realizará el denominado “Trasnochón”. El otro 50 % podrá ejercer su actividad económica el próximo martes 7 de julio, segundo día habilitado para esta actividad.
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Libardo Asprilla, director del IPES, indicó que “en todas nuestras jornadas de sensibilización y pedagogía, hemos insistido en la importancia que tiene la autorregulación, pero algunos vendedores informales no han acatado nuestras recomendaciones. Por ello, hemos liderado diferentes estrategias como la firma del Pacto Social para la Protección de la Vida y la Reactivación Económica en San Victorino para mitigar cualquier riesgo de contagio”.
Asprilla indicó a su vez que la nueva estrategia de ‘Pico y Puesto’ le “apuesta a la organización para evitar las aglomeraciones que se dan producto de la venta y compra en el espacio público”.
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Con el fin de que allá una correcta identificación de los vendedores informales, las credenciales que entregó el IPES se encuentran marcadas con el nombre del vendedor, número de cédula, el tramo en el que puede ejercer su actividad económica y número que le corresponde para el “Pico y Puesto”. Adicionalmente, las credenciales cuentan con un código QR para el control y vigilancia de las autoridades competentes al ingreso a San Victorino.
Desde la firma del pacto con los vendedores informales y comerciantes de San Victorino, el IPES ha acompañado las tres jornadas de “Trasnochón” y ha realizado campañas con vendedores informales, comerciantes y compradores de sensibilización para promover el autocuidado y cuidado colectivo, para evitar cualquier riesgo de contagio. También, realizó la entrega de cuatro mil tapabocas, que donó el comercio para la protección de todos los que circulan por este importante sector.
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Por Redacción Bogotá
