Como un joven tranquilo, que no tenía problemas con nadie. Así describe Doris Núñez a su hijo Edison Fabián Perdomo, de 15 años, quien fue asesinado el pasado domingo 11 de junio, en hechos que son materia de investigación, que se registraron en el sector de La Capilla, en el barrio Altos de Cazucá, de la comuna cuatro de Soacha.
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Lo que se conoce hasta el momento es que sobre las 6:45 de la mañana, integrantes de la Policía del vecino municipio recibieron el reporte de una riña, en la calle 48 con carrera 22B. Según Diomedes Perdomo, primo de la víctima, allí se celebraba una fiesta de cumpleaños, donde se desató una pelea y llamaron a la Policía. Sin embargo, tras la llegada de varios uniformados —quienes pidieron refuerzos y terminaron siendo más de 10— todo terminó en un enfrentamiento con los civiles y en un presunto uso excesivo de la fuerza policial.
“A Edison lo habían invitado a una fiesta de 18 años. De un momento a otro empezó una pelea y se llamó a la Policía, pero ellos llegaron alebrestados y agresivos, y empezaron a golpear a todo el mundo. Por eso los muchachos se alborotaron y se defendieron. Esa gente [los uniformados] sacaron sus armas de dotación y empezaron a disparar. Unos muchachos tumbaron la moto de un policía y le estaban dando patadas. Fabián fue a hacer lo mismo y un uniformado le disparó en la cara”, narra su familiar.
Conforme con el reporte de Medicina Legal, el menor perdió la vida tras recibir un impacto de bala a la altura del pómulo derecho, lo cual le ocasionó la muerte de manera inmediata.
No obstante, su deceso tiene un agravante y es que en grabaciones de los testigos se aprecia como dos de sus amigos intentaron socorrerlo y llevarlo en una moto a un centro asistencial, pero los policías lo impidieron. Incluso, dicen y se ve en algunos videos, que los amenazaron con un arma cortopunzante para evitar que se lo llevaran.
Así se logra evidenciar en la filmación compartida por el concejal de Bogotá Diego Cancino, quien denunció el caso desde su cuenta de Twitter:
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“La Policía no dejó que lo llevaran a urgencias. Luego del disparo, un amigo de él se montó a la moto, junto con otra compañera, dispuestos a llevarlo, pero más abajo otros policías los hicieron parar. Los amenazaron con un puñal en la mano e hicieron que su cuerpo se cayera de la motocicleta”, recuerda Diomedes, quien confirma que finalmente a su primo lo trasladaron al Hospital Cardiovascular de Cundinamarca, en el barrio San Mateo, de Socha, pero llegó al centro asistencial sin signos vitales.
Este hecho es materia de investigación por la Fiscalía General de la Nación y, de acuerdo con Heiner Gaitán Parra, concejal de Soacha, no es la primera vez que los uniformados exceden su fuerza en un operativo.
Como antecedente recuerda lo que sucedió en el 2020, en el sector de Ciudadela Sucre, en la misma comuna. Allí se intervino una situación de orden público, frente a la ocupación irregular de terrenos y, según el cabildante, “se le ocasionó la muerte por un disparo a Duván Mateo Aldana, de 13 años, residente del sector”.
Cabe señalar que hasta el cierre de esta edición la administración municipal no se había pronunciado sobre el caso, a pesar de que, según comenta Gaitán, no solo murió Edison Fabián Perdomo, sino que otras cinco personas resultaron heridas. De hecho, en las grabaciones, que han sido compartidas en redes sociales, se aprecia que uno de los uniformados patea a una de las mujeres que estaban en la disputa, quien cae al suelo por las agresiones.
En entrevista con la sección Bogotá de El Espectador, una defensora de derechos humanos, quien por seguridad pidió omitir su identidad, y es integrante de la Fundación Rosa Negra —organización que denuncia situaciones de abuso policial en Soacha—, manifestó que los familiares y vecinos han recibido amenazas para no avanzar en el proceso de investigación. Agregó que la familia, incluso, decidió hacer las exequias del joven en Neiva (Huila), no solo porque su familia es de allá, sino porque se sienten atemorizados en el barrio.
“En este momento se está poniendo en juego también la vida de su familia, porque al parecer están amenazados y no pueden volver al barrio. Hemos hablado con la señora Doris Núñez, quien nos enfatiza en que ha recibido amenazas vía telefónica. Además, supuestamente también tienen intimidados a los vecinos para que les informen cuando llegue la familia Perdomo”, aseveró la defensora a este medio.
La respuesta de la Policía
A través de un comunicado de prensa, el coronel Diego Fernando Vásquez, comandante de la Policía de Soacha, se pronunció sobre este caso. Afirmó que en el enfrentamiento con los civiles tres uniformados resultaron lesionados: uno con arma blanca, otro por un impacto de arma traumática y el tercero por golpes de gravedad, por los que tuvieron que remitirlos a un centro asistencial.
Así mismo, se anunció la apertura de una investigación disciplinaria, por la Inspección General de la Policía, para esclarecer los hechos, en los cuales capturaron a uno de los civiles que agredió a los uniformados.
Por su parte, el brigadier general Carlos Triana, inspector general de la Policía Nacional, señaló que en la acción penal, los actos urgentes los asume el CTI de la Fiscalía, para determinar responsabilidades. Además, “la acción disciplinaria se apertura, para determinar responsabilidades en las actuaciones del procedimiento”.
Por ahora, tanto los padres como los tres hermanos de Fabián afrontan su pérdida y le dicen adiós a los sueños que tenía este menor que anhelaba convertirse en DJ y estudiar una carrera asociada a la mecánica. Piden justicia, mientras reciben asesoría de la Fundación Rosa Negra, desde donde afirman que tiene a la fecha 11 casos de abuso policial en Socaha, esperan para que este asesinato no quede en la impunidad.
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Por Cristian Camilo Perico Mariño
