
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Marco Antonio Parra Rodríguez, señalado feminicida de Emily Villalba, de 15 años, no aceptó el cargo de feminicidio agravado que le imputó la Fiscalía este sábado 15 de marzo. Esto, en contraste al abundante material probatorio que tiene el ente investigador para probar cómo siguió y asesinó a la menor cuando ella se dirigía a su vereda desde Chocontá.
Le puede interesar: “Clamo justicia”: mamá de Emily Villalba da emotivo adiós a su hija en Chocontá
En medio de las audiencias de legalización de captura y medida de aseguramiento, la Fiscalía presentó la cronología de los hechos ocurridos el pasado 12 de marzo, en los que Parra habría participado con plena consciencia de sus actos. “La asechó como un ave carroñera que espera a su presa para atacarla. Vio la hora en la que la menor se desplazaba desde el municipio de Chocontá hacia su vereda”, relató el fiscal en la diligencia.
La investigación que adelantaron fiscales de Bogotá permitió establecer que Parra Rodríguez habría abordado a la menor en la vereda Pueblo Viejo Alto y la condujo a un área boscosa, donde posteriormente las autoridades hallaron el cuerpo.
Los registros de cámaras de seguridad son clave, así como otras evidencias que indican que el hombre fue la última persona que tuvo contacto con ella. Aunque Parra sostuvo que se encontraba en esa zona porque, supuestamente, le habían robado la bicicleta, en la inspección del lugar donde fue encontrada Emily, encontraron una prenda, un bolso y un celular que serían propiedad de Parra Rodríguez.
Desde un penitenciario, el imputado por feminicidio agravado, continuará su proceso con la justicia en el esclarecimiento de este nuevo feminicidio que enluta al país.
Chocontá despidió a Emily
Chocontá afronta el luto por el feminicidio de Emily Villalba, de 15 años, asesinada, al parecer, por su vecino, hoy capturado. Con mucho dolor y actos conmemorativos, amigos, familiares y la comunidad, despidieron a la menor recordando sus cualidades y exigieron, en un canto unísono, justicia y cese de violencia contra las niñas y mujeres. Su madre habló en cámaras, expresando el inmenso dolor que le produjo perder a su única hija.
Emily hacía parte de la Banda Sinfónica y de la Banda Marcial del colegio Agro Industrial, donde le apasionaba interpretar los instrumentos como el bombo, timbales, platillos y redoblantes. Por esta razón, los actos que se llevaron a cabo este sábado 15 de marzo, contaron con la participación de la banda y el sello musical que representan dos de sus más grandes pasiones. Hubo, además, una misa en su memoria.
“Nadie merece que le quiten a una compañera, a una amiga, a una hermana, a una hija. Nadie merece que le quiten a una la sonrisa y el brillo. Es una sensación de vacío inmensa”, señaló a Noticias Caracol, Luz Enith Cruz, compañera de Emily, en medio de las muestras artísticas y movilización de este sábado.
“Tengo el corazón destrozado”, dijo Yuliana Vergara, madre de Emily, al noticiero. “Es muy duro perder mi única niña. Necesito que la ley opere y le caiga todo el rigor de la ley a este maldito que le hizo eso a mi hija”, añadió entre lágrimas.
Siga leyendo: El ocaso de la tradición: la competencia desigual amenaza a los tenderos de barrio
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

Por Redacción Bogotá
