Nación y Distrito construirán 30 colegios nuevos en Bogotá
Está por definirse cuántos serán por concesión y cuántos funcionarán mediante el modelo tradicional.
Redacción Bogotá
La meta del alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, de construir 30 colegios nuevos en los próximos cuatro años recibió este martes un importante espaldarazo. Tras una reunión que sostuvo con el presidente Juan Manuel Santos, acordaron que este número de instituciones serán financiadas por la Nación y la Alcaldía, para lo que aportarán en conjunto $394.000 millones.
La meta es que en la actual administración se inviertan $540.000 millones en la construcción de colegios nuevos, informaron después de su encuentro, el tercero desde enero, cuando arrancó el mandato de Peñalosa.
La meta de 30 colegios nuevos, en lote nuevo, es la misma que se planteó hace cuatro años el entonces alcalde Gustavo Petro, pero solo logró contratar la construcción de tres planteles. Incumplió, sobre todo, porque no encontró suficiente suelo disponible para hacerlo, y por eso se dedicó a sortear los líos con que cargaba la tierra. Dejó, de acuerdo con un estudio presentado a finales de 2015, 150.930 metros cuadrados habilitados para que la actual administración pudiera comenzar a levantar la infraestructura educativa necesaria.
La secretaria de Educación, María Victoria Angulo, le dijo a este diario que tienen como base ese estudio para definir dónde quedarán los nuevos colegios, pero están teniendo en cuenta nuevas variables, como “necesidades de matrícula, tasa de crecimiento poblacional y dónde hay espacios y suelo habilitado que permiten hacer este equipamiento educativo de las dimensiones que queremos. Además, estamos conectándolo con soluciones de movilidad. Así generaríamos mucha infraestructura conexa a la escuela”.
La funcionaria agregó que aún no está claro bajo qué modalidades operarán estas instituciones: si bajo el modelo de administración tradicional, en el que la Alcaldía se encarga de la operación directa de los planteles; o bajo concesión, ante lo cual una institución privada se encarga de administrar.
Eso, sin duda, abrirá de nuevo el debate sobre la posibilidad de ampliar el modelo de colegios en concesión (cuyos críticos consideran una forma de privatización). Actualmente, existen 22 instituciones en Bogotá que operan de esta manera.
Cambios en primera infancia
El presidente Santos anunció que la política de primera infancia del Distrito (que se encarga de la atención de niños entre cero y cinco años) se articulará a la política nacional, que está a cargo del ICBF y es conocida por el programa De cero a siempre.
“Armonizaremos la oferta del ICBF con la oferta de la ciudad tanto en las modalidades de atención como en los estándares de calidad”, precisó Santos. “De más de 723.000 niños en Bogotá, solo el 58% (420.000) cuenta con atención, mientras que el 42% no (unos 303.000). El Distrito ampliará la cobertura siguiendo el modelo de los Centros de Desarrollo Integral (CDI)”.
En su diálogo con El Espectador, la secretaria Angulo añadió que la pretensión es, además, articular el trabajo de su despacho con el de la Secretaría de Integración Social, que está a cargo de la atención de los niños hasta cinco años.
La funcionaria considera que deben hacerse ajustes para que los niños sean atendidos de mejor manera: “Hoy nos encontramos con niños que atiende la Secretaría de Educación de tres a cinco años, por un lado; y con otros que atiende Integración Social con múltiples programas, pero como esto no fue pensado como una única ruta, hoy no podría hablar del impacto ni de la calidad de esa atención”, indicó Angulo.
Diseñar una ruta única permite, de acuerdo con ella, “que sin importar si se atienden los niños en colegios, jardines o CDI, al padre le garanticemos la información sobre su hijo, mediante un sistema de información y calidad que permita rendirle cuentas a cada familia”.
Jornada única y otros puntos
Tras el encuentro en Casa de Nariño, el presidente anunció la implementación de la jornada única en 81 colegios de Bogotá.
En Bogotá actualmente hay 34 colegios donde se aplica la jornada única, que le implica a cada alumno estudiar ocho horas diarias de lunes a viernes. Los 81 colegios adicionales a los que se hizo referencia son un grupo de instituciones que la pasada administración determinó que pasaran de jornada doble a jornada única, pero que aún no cuentan con todas las posibilidades de hacerlo, pues se requiere, sobre todo, infraestructura y personal suficiente.
Es una queja de la Alianza Distrital de Educadores (ADE), el sindicato de maestros de Bogotá, que este año ha desatado conflictos en colegios como el Tomás Carrasquilla, en la localidad Rafael Uribe, donde la Secretaría debió sentarse a dialogar con estudiantes y maestros después de que estos salieron a protestar por falta de condiciones mínimas para implementar la jornada única.
Por eso, Santos anunció la llegada de 500 profesores para que cubran la demanda que requiere ese modelo, así como un plan de intervención en la infraestructura de las instituciones, particularmente en lo que a su oferta de comedores se refiere.
Otro punto sobre el que hubo anuncios fue el fomento de la educación superior integrando las cadenas productivas de la región a la cadena de formación de los estudiantes.
La meta del alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, de construir 30 colegios nuevos en los próximos cuatro años recibió este martes un importante espaldarazo. Tras una reunión que sostuvo con el presidente Juan Manuel Santos, acordaron que este número de instituciones serán financiadas por la Nación y la Alcaldía, para lo que aportarán en conjunto $394.000 millones.
La meta es que en la actual administración se inviertan $540.000 millones en la construcción de colegios nuevos, informaron después de su encuentro, el tercero desde enero, cuando arrancó el mandato de Peñalosa.
La meta de 30 colegios nuevos, en lote nuevo, es la misma que se planteó hace cuatro años el entonces alcalde Gustavo Petro, pero solo logró contratar la construcción de tres planteles. Incumplió, sobre todo, porque no encontró suficiente suelo disponible para hacerlo, y por eso se dedicó a sortear los líos con que cargaba la tierra. Dejó, de acuerdo con un estudio presentado a finales de 2015, 150.930 metros cuadrados habilitados para que la actual administración pudiera comenzar a levantar la infraestructura educativa necesaria.
La secretaria de Educación, María Victoria Angulo, le dijo a este diario que tienen como base ese estudio para definir dónde quedarán los nuevos colegios, pero están teniendo en cuenta nuevas variables, como “necesidades de matrícula, tasa de crecimiento poblacional y dónde hay espacios y suelo habilitado que permiten hacer este equipamiento educativo de las dimensiones que queremos. Además, estamos conectándolo con soluciones de movilidad. Así generaríamos mucha infraestructura conexa a la escuela”.
La funcionaria agregó que aún no está claro bajo qué modalidades operarán estas instituciones: si bajo el modelo de administración tradicional, en el que la Alcaldía se encarga de la operación directa de los planteles; o bajo concesión, ante lo cual una institución privada se encarga de administrar.
Eso, sin duda, abrirá de nuevo el debate sobre la posibilidad de ampliar el modelo de colegios en concesión (cuyos críticos consideran una forma de privatización). Actualmente, existen 22 instituciones en Bogotá que operan de esta manera.
Cambios en primera infancia
El presidente Santos anunció que la política de primera infancia del Distrito (que se encarga de la atención de niños entre cero y cinco años) se articulará a la política nacional, que está a cargo del ICBF y es conocida por el programa De cero a siempre.
“Armonizaremos la oferta del ICBF con la oferta de la ciudad tanto en las modalidades de atención como en los estándares de calidad”, precisó Santos. “De más de 723.000 niños en Bogotá, solo el 58% (420.000) cuenta con atención, mientras que el 42% no (unos 303.000). El Distrito ampliará la cobertura siguiendo el modelo de los Centros de Desarrollo Integral (CDI)”.
En su diálogo con El Espectador, la secretaria Angulo añadió que la pretensión es, además, articular el trabajo de su despacho con el de la Secretaría de Integración Social, que está a cargo de la atención de los niños hasta cinco años.
La funcionaria considera que deben hacerse ajustes para que los niños sean atendidos de mejor manera: “Hoy nos encontramos con niños que atiende la Secretaría de Educación de tres a cinco años, por un lado; y con otros que atiende Integración Social con múltiples programas, pero como esto no fue pensado como una única ruta, hoy no podría hablar del impacto ni de la calidad de esa atención”, indicó Angulo.
Diseñar una ruta única permite, de acuerdo con ella, “que sin importar si se atienden los niños en colegios, jardines o CDI, al padre le garanticemos la información sobre su hijo, mediante un sistema de información y calidad que permita rendirle cuentas a cada familia”.
Jornada única y otros puntos
Tras el encuentro en Casa de Nariño, el presidente anunció la implementación de la jornada única en 81 colegios de Bogotá.
En Bogotá actualmente hay 34 colegios donde se aplica la jornada única, que le implica a cada alumno estudiar ocho horas diarias de lunes a viernes. Los 81 colegios adicionales a los que se hizo referencia son un grupo de instituciones que la pasada administración determinó que pasaran de jornada doble a jornada única, pero que aún no cuentan con todas las posibilidades de hacerlo, pues se requiere, sobre todo, infraestructura y personal suficiente.
Es una queja de la Alianza Distrital de Educadores (ADE), el sindicato de maestros de Bogotá, que este año ha desatado conflictos en colegios como el Tomás Carrasquilla, en la localidad Rafael Uribe, donde la Secretaría debió sentarse a dialogar con estudiantes y maestros después de que estos salieron a protestar por falta de condiciones mínimas para implementar la jornada única.
Por eso, Santos anunció la llegada de 500 profesores para que cubran la demanda que requiere ese modelo, así como un plan de intervención en la infraestructura de las instituciones, particularmente en lo que a su oferta de comedores se refiere.
Otro punto sobre el que hubo anuncios fue el fomento de la educación superior integrando las cadenas productivas de la región a la cadena de formación de los estudiantes.