‘‘Ni una rueda, ni un bus’’: Peñalosa asegura que no tiene ningún interés en TransMilenio

La búsqueda de una transformación del sistema TransMilenio en todo sentido, como parte fundamental de las medidas para fortalecer la movilidad en Bogotá, ha puesto al alcalde Mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa, en medio de una ráfaga de señalamientos por su supuesto vínculo con el Instituto para el Desarrollo de Políticas para el Transporte (ITDP, por sus siglas en inglés).

Las conjeturas, que surgieron luego de una columna de Yohir Akerman publicada en este diario en 2015, y revalidadas a inicios de este mes por el diseñador industrial y profesor Carlos Carrillo, a través de su blog, han generado en la ciudadanía una sensación de que la segunda alcaldía de Peñalosa priorizará la adecuación y construcción de nuevas troncales del sistema, en lugar de la puesta en marcha del Metro de Bogotá. Sensación, que el mismo burgomaestre ha desmentido desde el momento en que vio la luz la columna de Akerman, la cual calificó de ‘ridícula’, negando además algún conflicto de intereses.

Este jueves, el alcalde de Bogotá rechazó una vez más que existan supuestos vínculos entre él y Transmilenio. Además, aseguró que su administración no descartará la construcción del Metro con el fin de llevar a cabo el fortalecimiento y renovación del sistema, como afirman varios sectores de oposición a su gestión. De hecho, las afirmaciones de Peñalosa son hechas el mismo día en que se anunció la convocatoria a sesiones extraordinarias en el Concejo de Bogotá, con el fin de discutir la creación de la empresa Metro, y dar inicio formal a la materialización del que hasta ahora ha sido el eterno proyecto para la capital del país. (Lea: Alcaldía de Bogotá pedirá al Concejo crear la empresa Metro).

“No tengo ningún interés, una rueda o un bus, ni absolutamente nada y si yo tuviera algo ya lo habrían sacado. Prácticamente ni siquiera sé quiénes son los operadores de Transmilenio, pero estoy convencido de que es un sistema importante y muy necesario. Vamos a hacer el metro pero TransMilenio seguirá siendo crucial y hay que ponerlo a funcionar bien”, indicó en diálogo con Caracol Radio el mandatario distrital.

Akerman, en agosto de 2015, señaló al entonces candidato a la Alcaldía de Bogotá por el ‘Equipo por Bogotá’, de desempeñarse como conferencista en temas como movilidad, urbanismo y desarrollo sostenible. Carrillo, por su parte, señala al hoy alcalde de la capital del país como presidente de la organización internacional dedicada a promover en el mundo sistemas tipo Transmilenio, lo cual habría implicado tanto una retribución económica, como la apertura de mercados a Volvo y Scania, gigantes de la fabricación de autobuses en el mundo y proveedores de vehículos de TransMilenio. Ambos señalamientos fueron replicados por Peñalosa, argumentando inconsistencias en las recriminaciones que le hacen. 

Cuando recién inició su gestión, Peñalosa señaló que construirá hasta 8 troncales de TransMilenio: Carrera Séptima, Avenida Boyacá, Avenida Ciudad de Cali,  arrera 68, Avenida Longitudinal de Occidente (ALO), y la continuación de la calle 13 desde Puente Aranda. Además, renovará las ya existentes por la Avenida Caracas y la Autopista Norte. Así mismo, según el alcalde de Bogotá, si todo sale como está planeado, los bogotanos tendrán su primera línea de metro en 2022, reafirmando así la labor que pretende realizar para buscar una movilidad menos densa en Bogotá. 

La búsqueda de una transformación del sistema TransMilenio en todo sentido, como parte fundamental de las medidas para fortalecer la movilidad en Bogotá, ha puesto al alcalde Mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa, en medio de una ráfaga de señalamientos por su supuesto vínculo con el Instituto para el Desarrollo de Políticas para el Transporte (ITDP, por sus siglas en inglés).

Las conjeturas, que surgieron luego de una columna de Yohir Akerman publicada en este diario en 2015, y revalidadas a inicios de este mes por el diseñador industrial y profesor Carlos Carrillo, a través de su blog, han generado en la ciudadanía una sensación de que la segunda alcaldía de Peñalosa priorizará la adecuación y construcción de nuevas troncales del sistema, en lugar de la puesta en marcha del Metro de Bogotá. Sensación, que el mismo burgomaestre ha desmentido desde el momento en que vio la luz la columna de Akerman, la cual calificó de ‘ridícula’, negando además algún conflicto de intereses.

Este jueves, el alcalde de Bogotá rechazó una vez más que existan supuestos vínculos entre él y Transmilenio. Además, aseguró que su administración no descartará la construcción del Metro con el fin de llevar a cabo el fortalecimiento y renovación del sistema, como afirman varios sectores de oposición a su gestión. De hecho, las afirmaciones de Peñalosa son hechas el mismo día en que se anunció la convocatoria a sesiones extraordinarias en el Concejo de Bogotá, con el fin de discutir la creación de la empresa Metro, y dar inicio formal a la materialización del que hasta ahora ha sido el eterno proyecto para la capital del país. (Lea: Alcaldía de Bogotá pedirá al Concejo crear la empresa Metro).

“No tengo ningún interés, una rueda o un bus, ni absolutamente nada y si yo tuviera algo ya lo habrían sacado. Prácticamente ni siquiera sé quiénes son los operadores de Transmilenio, pero estoy convencido de que es un sistema importante y muy necesario. Vamos a hacer el metro pero TransMilenio seguirá siendo crucial y hay que ponerlo a funcionar bien”, indicó en diálogo con Caracol Radio el mandatario distrital.

Akerman, en agosto de 2015, señaló al entonces candidato a la Alcaldía de Bogotá por el ‘Equipo por Bogotá’, de desempeñarse como conferencista en temas como movilidad, urbanismo y desarrollo sostenible. Carrillo, por su parte, señala al hoy alcalde de la capital del país como presidente de la organización internacional dedicada a promover en el mundo sistemas tipo Transmilenio, lo cual habría implicado tanto una retribución económica, como la apertura de mercados a Volvo y Scania, gigantes de la fabricación de autobuses en el mundo y proveedores de vehículos de TransMilenio. Ambos señalamientos fueron replicados por Peñalosa, argumentando inconsistencias en las recriminaciones que le hacen. 

Cuando recién inició su gestión, Peñalosa señaló que construirá hasta 8 troncales de TransMilenio: Carrera Séptima, Avenida Boyacá, Avenida Ciudad de Cali,  arrera 68, Avenida Longitudinal de Occidente (ALO), y la continuación de la calle 13 desde Puente Aranda. Además, renovará las ya existentes por la Avenida Caracas y la Autopista Norte. Así mismo, según el alcalde de Bogotá, si todo sale como está planeado, los bogotanos tendrán su primera línea de metro en 2022, reafirmando así la labor que pretende realizar para buscar una movilidad menos densa en Bogotá.