Cuatro días lleva desaparecido el sacerdote Carlos Saúl Jaimes Guerrero. Una álgida búsqueda continúa en el municipio de Viotá, desde un Puesto de Mando Unificado, en el que las autoridades monitorean los hallazgos y siguen las pistas de este caso.
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El martes 17 de junio, en la vereda La Unión, La Orden de San Agustín, a la que pertenecía el sacerdote, reportó la desaparición del hombre de 30 años. Esto, ante la alerta que suscitó la incomunicación del padre y posterior hallazgo de la camioneta en la que iba, con las llaves puestas y encendida, pero sin rastro del religioso.
La Policía de Cundinamarca informó que dispuso de un equipo especializado; la Fiscalía activó el Mecanismo de Búsqueda Urgente, pero a cuatro días de lo ocurrido, no hay resultados.
“Se llevó a cabo un consejo de seguridad extraordinario con la presencia de las autoridades político-administrativas del municipio y representantes de entidades civiles, con el fin de definir estrategias para fortalecer la búsqueda“, indicaron las autoridades.
Las pistas
Destaca que al momento de su repentina desaparición, el sacerdote se encontraba en una finca de su congregación agustiniana, de la cual es administrador.
La Alcaldía de Viotá emitió una comunicación indicando que una vez se supo del caso, de manera inmediata las autoridades se dirigieron a la hacienda Casa Coima, localizada en la vereda la Unión. Además, no descartan que se trate de un caso de secuestro extorsivo.
“El miércoles, se adelantó reunión extraordinaria del consejo de gestión del riesgo municipal, para activar el Puesto de Mando Unificado (PMU), con el propósito de iniciar la búsqueda en terreno por parte de los diferentes órganos de seguridad y de socorro que conforman el consejo”, señala la comunicación.
Desde el municipio se ofreció $10 millones para quienes tengan información que conduzca a encontrar al padre.
Por su parte, los hermanos del sacerdote pidieron colaboración en la búsqueda del padre. Uno de ellos pidió “a quiénes lo tengan en contra de su voluntad, dígannos cómo está, qué quieres, que nos den esa llamada. Lo estamos buscando por cielo, mar y tierra”, dijo un hermano a Noticias Caracol. “Solamente es un servidor de Dios, un sacerdote, una persona apreciada por su familia y su comunidad”, añadió otra hermana en el noticiero.
¿Cómo desapareció?
El reporte de la desaparición está registrado en Medicina Legal desde el 17 de junio. De acuerdo las autoridades, el padre fue última vez visto en una hacienda que, al parecer, estaba a su cargo.
Pero lo que prendió las alarmas fue el hallazgo de la camioneta en la que iba el sacerdote al momento de su desaparición. Fue encontrada en inmediaciones de una quebrada, con las puertas abiertas.
Hasta el momento la Fiscalía de Cundinamarca informó a este diario de la activación del Mecanismo de Búsqueda Urgente, cuyo objetivo principal es que las autoridades judiciales ordenen inmediatamente todas las diligencias necesarias para la localización de Carlos Jaimes Guerrero e identificar si se trató de un secuestro.
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Por Redacción Bogotá
