Bogotá está cerca de alcanzar la cifra más baja de personas lesionadas con pólvora durante las celebraciones de la temporada decembrina, desde que en 1995 empezó la lucha de las administraciones contra la mala manipulación de pirotecnia. Y aunque en la ciudad se siguen presentando casos de quemados con pólvora, pese a las campañas que advierten los peligros de su uso, las estadísticas evidencian un avance en la reducción no solo de los casos, sino de los riesgos.
De eso es muestra el pabellón de quemados del hospital Simón Bolívar, que durante diciembre no ha atendido casos de heridas provocadas por el uso de la pólvora. Es decir, de los 10 casos de lesionados por elementos pirotécnicos que según el Instituto Nacional de Salud se han registrado en lo corrido de mes, ninguno ameritó hospitalización en el Simón Bolívar o en otros centros de salud. Esto se debe a que los casos, según reportó la Secretaría de Salud, fueron atendidos de manera preliminar y al no representar mayor gravedad recibieron egresos hospitalarios.
Los registros de la celebración del 24 de diciembre también son motivo de satisfacción por parte de las autoridades. Cinco personas (cuatro adultos y un menor de edad) resultaron afectadas por quemaduras por pólvora durante las celebraciones de la Nochebuena. Sin embargo, como en todos los casos, las lesiones comprometieron menos del 5 % del cuerpo, por eso se consideraron incidentes de baja gravedad. En comparación con esta fecha del año anterior, se presentó una reducción del 50 % en la cantidad de lesionados.
Otro hecho por resaltar sobre los accidentes con pólvora durante la noche del 24 y el amanecer del 25 de diciembre es que en 17 de las 20 localidades de Bogotá no hubo registro alguno sobre personas manipulando pirotecnia de forma ilegal. Por eso, desde el Distrito solicitan que todos los capitalinos estén en sintonía con este proceso de toma de conciencia sobre los riesgos que implica manipular pólvora.
“Las tres localidades donde se registraron afectaciones son Engativá, Kennedy y Rafael Uribe Uribe. Invitamos a los ciudadanos de estas localidades a que se unan para seguir enviando un mensaje positivo a la ciudadanía y trabajando para que Bogotá reduzca sus cifras de quemados”, indicó el subdirector de Gestión del Riesgo de la Secretaria Distrital de Salud, Luis Enrique Beleño, quien agregó que los volcanes, pitos y bengalas son los elementos con los que más se suelen quemar las personas.
Aunque posiblemente no se consiga la meta de que caigan las cifras de quemados con pólvora por debajo del registro de 2007 (16 quemados en toda la temporada), la variación en las estadísticas es evidente: mientras el año pasado, a estas alturas se contaban 31 heridos por manipular pirotecnia ilegal (22 adultos y 9 menores de edad), este año van 10 casos (6 adultos y 4 niños).
La situación en Cundinamarca también es alentadora. El departamento registra una reducción del 40 %, con nueve casos en lo corrido del mes (seis adultos y tres niños). No obstante, la importancia de estas cifras se evidencia al comparar los registros de la capital y el departamento con otras importantes zonas del país.
Por ejemplo, en Atlántico, el departamento con más casos registrados este diciembre, van 60 quemados con pólvora, 13 de ellos en Barranquilla. La cifra de este departamento sorprende, pues hace un año se registraron 17 casos. Por su parte, Valle del Cauca lleva 45 casos de quemados, 11 más que el año anterior. En Antioquia, un departamento con cifras históricamente altas, van 31 quemados, 15 menos que en 2017.