Al extremo norte de Bogotá, en el cementerio Jardines del Recuerdo, en la autopista Norte con calle 205, las personas que van en carro de domingo a domingo a visitar las tumbas y mausoleos de sus familiares tienen que pagar una alta tarifa de parqueo, aunque una resolución de 2009 señaló que este cobro era ilegal. El pronunciamiento lo hizo la Alcaldía Menor de Suba el 15 de diciembre de ese año, mediante la resolución 1228.
En ella ordenó quitar el estacionamiento que opera City Parking y restituir de inmediato el espacio público. El requerimiento lo inició el Departamento Administrativo de la Defensoría del Espacio Público, argumentando que el cobro en este parqueadero era ilegal, más aún cuando no había un contrato de mantenimiento y administración con el Distrito, algo que contradicen las directivas de la empresa de parqueaderos, quienes señalan que todo está en regla.
La claridad sobre el debate está en el decreto 520 de 1970 y otros posteriores, que de tiempo atrás reglamentaron y reiteraron que las vías interiores del cementerio Jardines del Recuerdo son de propiedad de Bogotá. Pero han pasado cinco años y el parqueadero sigue funcionando. En septiembre de 2013, en una carta dirigida a la alcaldesa local de Suba, Marisol Perilla Gómez, el personero de Bogotá, Ricardo María Cañón, solicitó la recuperación de esas vías de la capital. Cañón explicó que, por tratarse de espacio público, la concesión estaba prohibida, y agregó que si la situación seguía interpondría una acción popular.
En diciembre de 2013, en la respuesta a un derecho de petición que envió el concejal de Bogotá Javier Palacio, quien ha insistido en la ilegalidad de este y otros parqueaderos, la alcaldesa de Suba, Marisol Perilla, reconoció que la decisión de cerrar el parqueadero nunca se notificó a Jardines del Recuerdo ni a City Parking. Por esa razón, el personero Cañón interpuso la acción popular, que hoy sigue su trámite ante un juez administrativo de Bogotá. También estudia interponer una acción de grupo, porque asegura que en este tiempo hubo una explotación económica “ilegal”.
“El único dueño al que no le duelen sus bienes es al Estado. Ese es el gran problema”, dice Cañón. Y parece que tiene razón, pues casi cinco años después de expedida la resolución que ordenó acabar con el cobro de este parqueadero, City Parking sigue cobrando por parquear en alguno de los 999 cupos que hay en Jardines del Recuerdo.
Consultado al respecto, Eduardo Bayón, gerente de City Parking, aseguró que tienen todo en regla. “Nosotros somos administradores delegados de ese parqueadero, no somos los dueños. Y como empresa operadora tenemos todos los permisos y papeles al día. Eso está radicado en Planeación, en la Alcaldía Local, y bajo ese parámetro operamos. Sabemos que actualmente hay algunos procesos que tendrán su curso legal. Por ahora, lo que puedo decir es que todo está en regla”.
Y sobre la polémica, insistió que hay problemas más grandes de movilidad en la ciudad. “En el tema de parqueaderos lo importante es ver cómo se han convertido en una solución a la movilidad urbana. En el caso del parqueadero de Jardines del Recuerdo, ha servido para que la gente que viene de afuera de Bogotá pueda dejar su carro todo un día por $5.800 y desde allí pueda usar el transporte público”.
Agregó: “Bogotá debe concentrarse en temas más importantes. Por ejemplo, el 33% de los carros parquea ilegalmente en las calles, irrespetando el espacio público, y nadie hace nada. O, por ejemplo, el tema de las tarifas de los parqueaderos, que están congeladas ilegalmente desde hace cinco años. Bogotá tiene la tarifa de parqueaderos más baja de Latinoamérica, pero el tema se ha politizado y ha sido bandera de muchas campañas, que, subsidiando en la tarifa de parqueadero a los estratos cinco y seis, busca conseguir votos”, concluyó.
Mientras se le pone punto final a la polémica alrededor del parqueadero de Jardines del Recuerdo, hay algo curioso que podría explicar la demora: en la Alcaldía Menor de Suba el caso es conocido como el “proceso caliente” y no es fácil encontrar información al respecto. Muchos podrán pensar que ese calificativo es un poco exagerado, tratándose de un parqueadero. Pero no lo es cuando se sabe que en promedio puede generar ingresos que superan los $37 millones mensuales, en febrero fueron de $34 millones, en marzo de $39 millones y en abril de $39 millones.
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Por Natalia Herrera Durán
