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El pico y cédula es una de las medidas con las que la Alcaldía de Bogotá busca disminuir el flujo de personas en las calles de la capital. Se empezó a aplicar de nuevo a finales de diciembre, debido a un fin de año caótico, en el que las aglomeraciones y la indisciplina social fueron las protagonistas, por lo que la ciudad enfrenta el segundo pico de la pandemia.
Para este lunes, la restricción aplica para los capitalinos cuya cédula termine en número par (0, 2, 4, 6, 8). Estos ciudadanos no podrán acceder a establecimientos de atención al público como supermercados, bancos, notarias y entidades públicas.
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La medida no aplica para servicios hoteleros y gastronómicos, como restaurantes, tampoco para museos, teatros, bibliotecas y cines, gimnasios, parques de diversiones y temáticos. También se encuentran exceptuados centros de salud, farmacias y servicios funerarios, además de servicios y trámites notariales, bancarios, financieros y administrativos donde se requiera la comparecencia simultánea de dos o más personas.
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Hace unas semanas, la Alcaldía de Bogotá aseguró que la medida iría hasta que se levantara la alerta roja y aunque la administración distrital anunció que la ciudad ahora estará en alerta naranja, la restricción se mantiene para establecimientos comerciales hasta nuevo aviso.
Cabe recordar que la cuarentena por UPZ se acabó la semana pasada y que, de igual forma, los toques de queda nocturnos ya no rigen en la ciudad. Sin embargo, todos los establecimientos pueden laborar hasta las 11:00 p.m. Los que incumplan con esta medida podrían ser sancionados.
