Las dos víctimas contactaron a uno de los integrantes de la banda a través de redes sociales con la intención de comprar supuesta maquinaria pesada que el sujeto estaba ofertando. Cuando llegó el momento de cerrar el negocio, en medio de la reunión con el falso vendedor, los comerciantes fueron amenazados con armas de fuego y retenidos contra su voluntad. Los secuestradores exigían $180 millones a cambio de su liberación.
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La negociación entre las víctimas, oriundas del departamento del Meta y alias Emilio, líder de la banda, inició en el mes de marzo luego de que este publicara ofertas para adquirir maquinaria pesada a precios menores que los ofertados por el mercado. Tras meses de negociaciones, finalmente las partes decidieron que el encuentro para cerrar el negocio se haría en el municipio de Soacha. En medio del encuentro, los dos compradores fueron sorprendidos por varios sujetos armados que se llevaron a los comerciantes con rumbo desconocido.
De acuerdo con las autoridades de Soacha, una vez en poder de los secuestradores, las víctimas fueron sometidas a torturas con el fin de que le entregaran los delincuentes $180 millones a cambio de su libertad. Además, durante las 12 horas que duró el secuestro, los comerciantes fueron obligados, bajo amenaza de muerte, a entregar las claves de sus cuentas bancarias, las cuales fueron saqueadas en cuestión de horas. Los delincuentes incluso compraron bonos de regalo en diferentes centros comerciales de Soacha para ser canjeados en la temporada navideña.
Para la ubicación y captura de los delincuentes fue clave la información de un ciudadano que atestiguó el momento del secuestro e informó el hecho a las autoridades. El testigo entregó información detallada de las características de los captores y del vehículo en el que se llevaron a los dos hombres.
Gracias a esa información, las autoridades lograron dar con el lugar donde estaban retenidos, logrando, además de la libertad de los dos hombres, las 3 capturas de los adultos y las dos aprehensiones de los menores de edad que conformaban la banda. Los señalados tienen antecedentes por secuestro extorsivo, hurto calificado y agravado, lesiones personales, tortura, fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones, uso de menores de edad para la comisión de delitos, concierto para delinquir, estafa y homicidio.
Las autoridades recordaron que ante cualquier hecho delictivo relacionado con secuestro o extorsión, pueden denunciar a través de la línea 165.
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Por Redacción Bogotá
