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Lo que parecía un robo simple que se había perpetrado en una de las calles del barrio Diana Turbay, al sur de la ciudad, terminó con un incautamiento sorpresivo para las autoridades que atendieron el caso.
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Todo comenzó cuando los uniformados adscritos a la Estación de Policía Rafael Uribe fueron requeridos en el barrio ya mencionado, para atender un intento de asonada. Alrededor de cien personas intentaban hacer justicia por su propia cuenta en contra de dos presuntos ladrones que habrían intentado robarle el celular a dos menores de edad que transitaban por la zona.
Gracias a la intervención de la comunidad, los señalados ladrones no pudieron llevarse los celulares o hacerle algún tipo de daño a los jóvenes. Posteriormente, al verse acorralados por la comunidad, los dos sospechosos del robo corrieron hacia su vivienda a refugiarse. Justo en ese momento se concretó el arribo de las autoridades.
Sin embargo, ante la indignación de la comunidad, la Policía y la Unidad de Diálogo y Mantenimiento del Orden (UNDMO) tuvieron que intervenir para calmar los ánimos y lograr ingresar al inmueble en donde se ocultaron los dos presuntos ladrones.
Durante la diligencia de identificación de estas dos personas, la Policía efectuó una orden de allanamiento en la vivienda, con el fin de encontrar cualquier tipo de indicio que los conectara con el hurto. Al ingresar a la vivienda, la sorpresa de los uniformados fue mayor, ya que se encontraron con todo un compendio de material exclusivo de sus colegas policías.
En el procedimiento, los policías encontraron un chaleco balístico con insignias policiales, un carnet policial, tres chaquetas fluorescentes similares a las utilizadas por SIJIN, y un arma de fuego tipo revólver con tres cartuchos.
Al preguntar si alguno de los sujetos pertenecía a la fuerza pública, estos lo negaron, por lo que se procedió automáticamente al proceso de captura.
Ambas personas fueron llevadas ante la autoridad competente para responder por los delitos de hurto y utilización ilegal de uniformes e insignias.
Hurtos en Bogotá
Con corte de marzo, 19.090 personas han sido víctimas de hurto en la ciudad, una variación de -20 % respecto al 2023. Los hombres son las mayores víctimas (14.040) y sin empleo de armas, el modo más usado por delincuentes. Así lo reporta el Sistema de Información Estadístico, Delincuencial, Contravencional y Operativo (SIEDCO) de la Policía Nacional.
Según el concejal, Andrés Barrios, los objetos que más le hurtan a la ciudadanía en Bogotá son: dinero, celular, cédula, bicicleta, documentos, billetera, accesorios de comunicación, computador portátil y tarjetas de crédito. Entre enero de 2022 y diciembre de 2024, los delincuentes robaron 528.522 elementos de este tipo.
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