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Casi $8 mil millones como indemnización están solicitando al Estado colombiano las familias de seis cadetes que murieron en el atentado terrorista contra la Escuela de Cadetes de Policía General Santander, cometido el 17 de enero de 2019.
Benjamín Herrera, abogado representante de las víctimas, argumentó que esta demanda está soportada sobre el hecho de que en el atentado hubo irregularidades violatorias de los Derechos Humanos, las cuales, asegura, deben evaluarse debido al impacto de la tragedia.
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Según explicó, en la Escuela de Cadetes hubo “falta de adecuadas medidas de protección en la puerta de ingreso de la Escuela de Cadetes, toda vez que la puerta denominada Halcón 14 estaba dañada desde hace varios años (…), razón por la cual el ingreso del terrorista que se auto-inmoló fue pan comido”.
Este hecho, a juicio de Herrera, les permite a las familias de los jóvenes muertos en el atentado reclamar la indemnización que concede el Consejo de Estado. Así mismo, afirmó que han reclamado daños y perjuicios para los hijos que perdieron a sus padres en el atentado.
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La solicitud, que también incluye una petición de medidas simbólicas de no repetición y la publicación de una sentencia, está en trámite de conciliación prejudicial a espera de una respuesta.
Por Redacción Bogotá
