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Del Río hizo el llamado, a propósito de la adjudicación a la firma Inversiones Guerfor que suministrará e instalará el nuevo mobiliario del estadio, que se espera esté listo el mes entrante.
Según la funcionaria, aunque para la ciudadanía resulta simbólico la identificación con los colores rojo y azul y los escudos de uno y otro equipo que en este momento tiene la silletería, los conflictos entre las “barras bravas” no contribuyen a la convivencia.
“Hasta la fecha las graderías del estadio han estado pintadas con estos colores, que corresponden a dos equipos capitalinos, lo que en la práctica ha generado automáticamente un alineamiento por parte de los asistentes”, explicó Del Río.
La funcionaria le pidió al IDRD escoger colores distintos a los tradicionalmente usados en la silletería como gris, beige, plateado o cualquier otro que resulte neutral.
Por El Espectador
